Ghislaine Maxwell, la socialité británica hija del magnate de los medio Robert Maxwell, conocida por su relación con Jeffrey Epstein fue arrestada este jueves en el estado de New Hampshire (EEUU). Nació el 25 de diciembre de 1961 y se mudó a Estados Unidos en 1991 tras la muerte de su padre. Desde entonces, entabló una relación íntima con el magnate estadounidense y supuestamente le ayudaba a captar adolescentes, generalmente de bajos recursos, para que tuvieran sexo con personas influyentes, incluido el mismo Epstein, a cambio de favores como educación y trabajo, de acuerdo a varias denuncias civiles. Además, mantuvo una supuesta relación amorosa con el multimillonario en la misma época.
La socialité de 58 años, que se encontraba prófuga de la Justicia desde hacía ya casi un año cuando Epstein fue arrestado, ha sido acusada de ser cómplice de los delitos cometidos por el que fuera su pareja, así como de conspirar para traficar con menores a las que pedía que llevaran a cabo actividades sexuales de forma ilegal. También ha sido acusada de traficar con menores para su explotación y de perjurio. El documento de imputación, al que accedió Efe, expone que la mujer "asistió, facilitó y contribuyó al abuso de niñas menores por parte de Jeffrey Epstein al, entre otras cosas, ayudarle a captarlas, prepararlas y en última instancia abusarlas, sabiendo ambos que las víctimas tenían menos de 18 años".
El caso de Epstein ha adquirido especial notoriedad por su relación con la élite política de Estados Unidos, desde el matrimonio Clinton al actual inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump. El presidente de Estados Unidos reconoció que sabía quién era Epstein, residente de Palm Beach, donde Trump tiene un campo de golf. "Tuve una pelea con él hace un tiempo. No soy precisamente un fan", declaró el mandatario tras conocer su muerte.
Maxwell creció y desarrollo su carrera en la alta sociedad londinense y ocupó varios puestos en las empresas de su padre. En 1991 causó un escándalo cuando se le fotografió abordando un Concorde con destino a Estados Unidos debido por el elevado coste para adquirir un ticket a bordo de esa nave. Su vida estuvo llena de lujos y era común verla a bordo de uno de los yates de la familia. A su llegada a Nueva York en 1991 se mudó a un piso con vistas a Central Park y trabajaba en una oficina de bienes raíces. Según el periódico 'The Times', en ese entonces Maxwell recibía un ingreso anual de 80.000 libras de un fondo de su padre y su integración a la élite neoyorquina fue inmediata. Desde ese entonces mantuvo una relación estrecha con Epstein y su cículo cercano.
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