Canal Cocina ha pasado la barrera de los veinte años en emisión. Un éxito para una cadena de pago que ha crecido hasta convertirse en una marca de referencia internacional, con gran implantación en latinoamérica.
Su imagen de marca de un huevo frito estampado define el icónico triunfo de una cadena que ha huido de ser un obvio contenedor de baratos programas culinarios extranjeros, doblados al español, para entender que su provenir pasaba por alzarse en referente en la producción propia de programas de cocina.
Un 80 por ciento de la producción de Canal Cocina está hecha en España. No podía ser de otra manera, como país netamente gastronómico. Programas que se exportan fuera de nuestras fronteras y nutren al internacional Canal Gourmet, también sobre gastronomía.
Pero, además, el acierto de Canal Cocina es que ha sabido estructurar sus espacios en pequeños bloques de media hora de duración, en los que es muy fácil encontrar todo tipo de recetas y engancharse aunque no sepas lo que programan, desde cómo cocinar por cinco euros hasta descubrir los trucos de los chefs de otros países. No hay tiempo para aburrirse y sí para descubrir diferentes espacios que son sencillos de consumir en directo -y también en la televisión "a la carta"- pues no duran más de 30 minutos. Y todo presentado con una realización muy cuidada. Porque la comida, como la televisión, tiene que entrar por los ojos.
Producción propia, programas breves, variedad gastronómica y un elenco de chefs-presentadores reconocibles son las sustancias principales para el sabroso guiso de la receta de Canal Cocina...
El ingrediente secreto de una receta televisiva
Pero hay otro ingrediente decisivo que ha sido clave en la consolidada marca que ha construido esta televisión temática: Canal Cocina es una cadena que sale a la calle y lo retrata muy bien en sus programas. Su caravana ha recorrido el país y ha sido visible por la sociedad, aunque no esté abonada a la televisión de pago.
Canal Cocina ha puesto a cocinar a los regidores de las ciudades españolas en las plazas de sus villas en Hoy cocina el alcalde o ha realizado un homenaje a las plazas de abastos españolas y a sus fieles clientes en Yo amo mi mercado, entre otros espacios que han retratado nuestra accesible, entretenida y plural cultura culinaria.
Romper la losa del programa enlatado
Los rodajes de exteriores son necesarios para romper con la losa de percepción de producción enlatada de las cadenas temáticas. Al apostar por programas realizados en exteriores con protagonistas vinculados a la actualidad política, en el caso de 'Hoy cocina el alcalde', Canal Cocina consigue airear su programación de esa sensación de atemporalidad del contenido y, asimismo, favoreciendo la curiosidad de un espectador que descubre ciudades o espera la aparición de la suya propia.
Un canal que sale a la calle y explora en su propio país. Así Canal Cocina conecta con nuestra idiosincracia nacional, como pocos canales, gracias al poder de la gastronomía y su diversidad. Porque un canal centrado en un mismo género también puede estructurar una programación variada, que no aburre, es práctica y, además, puede ser atractiva para los anunciantes. Canal Cocina lo ha demostrado con su luminosa proyección de una gastronomía apta para todos los públicos.
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