CAM suspende el pago de interés de tres emisiones

  • Tras dejar atrapados a los tenedores de cuotas participativas, la caja alicantina también ha dejado sin remunerar a los compradores de tres emisiones de preferentes y deuda subordinada. La entidad se acoge a las pérdidas presentadas el año pasado para no pagar a los ahorradores.
La CNMV suspende cautelarmente la cotización de la CAM
La CNMV suspende cautelarmente la cotización de la CAM
R. Ugalde

Tras dejar atrapados a los tenedores de cuotas participativas, la CAM también ha dejado sin remunerar a los compradores de tres emisiones de preferentes y deuda subordinada.

Así se lo acaba de comunicar la entidad levantina a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tras argumentar que las pérdidas del pasado ejercicio le permiten adoptar esta drástica decisión.

En concreto, CAM no remunerará la emisión de Deuda Subordinada Especial, registrada el 11 de noviembre de 2003; ni la emisión de Participaciones Preferentes Serie A, con fecha de registro del 15 de marzo de 2001; ni de la emisión de Participaciones Preferentes Serie B, con fecha de registro 17 de mayo de 2002.

En los tres casos, el abono de intereses estaba previsto para el próximo 15 de febrero.

Ésta es la tercera ocasión desde que fue intervenida por el Banco de España en julio, en que la entidad alicantina deja a los propietarios de deuda sin el cobro de sus intereses.


El mayor escándalo financiero español

Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) tiene el triste honor de estar convirtiéndose en el escándalo financiero de mayores dimensiones de la historia de España. Primero, porque se trata de la mayor intervención vivida en nuestro país.

Segundo, porque su cúpula está siendo objeto de un expediente disciplinario del Banco de España, además de que la Fiscalía Anticorrupción investiga a la ex directora general de la entidad, María Dolores Amorós, por presuntas irregularidades durante su gestión.

Tercero, porque la caja alicantina ha dejado atrapados a miles de ahorradores, mientras el Gobierno se lava las manos, tanto con sus cuotas participativas como, ahora, con la decisión de no pagar los intereses de sus emisiones.

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