"Es exactamente lo que significa la operación diálogo: requisar urnas, coger la competencia de los Mossos, arrasarlo todo y, cuando estemos tendidos en el suelo, a partir de entonces empezar a hablar", ha lamentado en declaraciones a los medios ante el TSJC, donde en esta ocasión han declarado los miembros de la Mesa Lluís Corominas y Ramona Barrufet.
Tras advertir que el Gobierno central no pondrá fácil el referéndum, ha asegurado que desconoce qué están dispuestos a hacer para impedirlo, pero sí sabe que "hasta ahora han judicializado la política, han utilizado la Fiscalía y todo el sistema judicial español, incluido el TC, para parar todo lo que se haga desde Catalunya, y han hecho toda la guerra sucia que han podido".
Para Mas, es vergonzoso que Forcadell y miembros de la Mesa deban "subir las escaleras del TJSC para ser juzgados por la vía penal, como si fuera delincuentes" por promover y permitir el debate y votación de resoluciones soberanistas en el Parlament.
"Es la demostración de la baja calidad de la democracia española, y debe ser un motivo más para intentar hacer el referéndum y ganarlo", ha zanjado.
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