MARGALLO DEFIENDE QUE EL PP HA HECHO “TODO LO QUE PODÍA HACER” CON BARBERÁ

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación en funciones, José Manuel García-Margallo, aseguró este viernes que el PP ofreció a la exalcaldesa de Valencia y senadora del PP, Rita Barberá, abandonar el Senado o el Grupo Parlamentario Popular y ella decidió quedarse en la Cámara Alta. “Hemos hecho todo lo que hemos podido hacer”, confesó.
Así se pronunció Margallo, en una entrevista en Antena 3 recogida por Servimedia, después de que Barberá haya decidido darse de baja en el PP y conservar su acta de senadora tras conocerse este martes que la Sala II del Tribunal Supremo abriese causa contra ella por un presunto delito de blanqueo de capitales.
En ese sentido, defendió que el presidente del Gobierno en funciones y del PP, Mariano Rajoy, no puede forzar a Barberá a renunciar a su escaño en la Cámara Alta porque “nadie puede privarla” de su acta de senadora. “El escaño pertenece a un senador y nadie se lo puede quitar”, sentenció.
ULTIMÁTUM
Esto le sirvió para reivindicar que el PP ha hecho “todo lo que hemos podido hacer” con la exalcaldesa de Valencia y explicó que los populares le ofrecieron “dos opciones”: abandonar el Senado o dejar el Grupo Parlamentario Popular. Ante este ultimátum, optó por permanecer en la Cámara Alta.
Margallo confirmó que ha mantenido estos días distintos contactos con Barberá y subrayó que ésta cree que “no ha habido un trato cariñoso y cercano” por parte de “algunos militantes” del PP, sin especificar a quienes se refería.
También comentó que la exalcaldesa de Valencia está convencida de que “no ha hecho nada” punible ante la Justicia, lo que le permitió contrastar la imagen de la mujer que lo “ha sido todo” en la capital del Turia con la de esa misma persona que ahora está “atrincherada” en su casa. “Los que somos sus amigos estamos pasando un mal momento”, lamentó.
ERES DE ANDALUCÍA
Por otro lado, empleó la metáfora “ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio” para referirse a las críticas que en el seno del PSOE ha suscitado el hecho de que ayer se conociera que la Fiscalía pide seis años de prisión para el expresidente de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán y 10 años de inhabilitación de empleo o cargo público para su predecesor, Manuel Chaves, por el caso de los ERE.
El jefe de la diplomacia española lamentó que los socialistas vean adecuado cada caso de corrupción que salpica al PP en vísperas de una cita electoral pero consideren un “acto inquisitorial inducido por el Gobierno” aquellos que les afectan directamente.
Margallo utilizó las cifras del ‘caso Barberá’ con el de los ERE para aseverar que las mismas son "elocuentes”, ya que mientras que a la primera se le acusa de donar “1.000 euros” al PP de manera presuntamente irregular, en el segundo caso la cifra presuntamente defraudada asciende a 741 millones.
A su vez, el ministro se dirigió a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, para reclamarle que se “pronuncie de un momento a otro” para dar respuesta a la petición de la Fiscalía respecto a los ERE. “La clave es la transparencia y la ciudadanía debe saber qué ha pasado”, remachó.

Mostrar comentarios