Garaicoa revisa su lenguaje creativo en busca de un orden poético y político

Santander (España), 28 oct.- La doble visión poética y política de la obra de Carlos Garaicoa sirve de hilo conductor para la nueva exposición del artista cubano, en la que revisa los diez últimos años de su trabajo y los distintos lenguajes creativos que ha utilizado, tratando de buscar un orden en todo ello.

"Orden Aparente (poético-político)" es el título de esta muestra, que podrá verse desde mañana hasta el 15 de marzo de 2015 en la sala de exposiciones de la Fundación Botín en Santander (norte).

En ella, Garaicoa (La Habana, 1967) intenta hacer un "mapa" de su trabajo y averiguar si en su obra hay un "orden aparente", o si habita en un "orden social inconcluso", tal como ha explicado hoy a los periodistas en una visita guiada.

Esa reflexión se completa en una segunda muestra, titulada "Orden Inconcluso (político-poético)", que se inaugurará el 23 de noviembre en el Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid.

En la Fundación Botín, el artista expone 35 obras en diversos formatos: instalación, vídeo, fotografía, escultura, libros, "pop-up" y dibujos, que muestran su imaginario artístico y su discurso crítico.

Entre ellas, destaca su serie "Las joyas de la Corona" (2009), siete miniaturas en plata de edificios como la sede de la KGB, la base naval de Guantánamo, el Pentágono o el Estadio Nacional de Chile.

Son espacios que asocia a centros de "violencia y represión" en los años de la Guerra Fría y que asimila ahora con los centros del poder económico, porque hoy, a su juicio, "la violencia social gira en torno a la economía y la corrupción".

Por eso, ahora ha creado dos nuevas joyas que podrán verse en la exposición de Madrid, que reproducen el Bundesbank y el Banco de España, pero esta vez, en oro de 24 quilates, y así es el material el que "habla directamente".

Y es que Garaicoa se sirve de los materiales para "aportar lingüísticamente algo más" a sus obras, materiales, por ejemplo, como los hilos y los alfileres con los que reconstruye otras de sus fotografías.

No faltan tampoco en esta muestra varias imágenes de su serie "La palabra transformada", con fotos de los paneles hoy vacíos que sirvieron para plasmar los eslóganes políticos del socialismo cubano, que él transforma superponiendo nuevos mensajes poéticos y sociales.

Otras veces no son palabras lo que reconstruye Garaicoa sobre esas antiguas vallas, sino edificios, porque, según dice, "la palabra política sólo tiene sentido" si se transforma con un uso social.

El artista, uno de los más originales y reconocidos de la generación nacida tras la revolución cubana, reúne además en esta exposición trabajos como su serie "Infames casas ocultas", que retrata, entre otras, la casa en la que murió Osama Bin Laden o la que se estaba construyendo en Ibiza el empresario Francisco Correa, presunto cabecilla de la trama Gürtel.

También puede verse uno de sus trabajos más recientes, "De la serie fotógrafo de domingo", realizada en la ciudad ucraniana de Donetsk en 2013, además de su obra "Porque toda ciudad tiene derecho a llamarse utopía", aunque él no es partidario de pensar en utopías y apuesta por convertir las ideas y los sueños en realidades.

Asimismo, la muestra, comisariada por Vicente Todolí (presidente de la comisión asesora de artes plásticas del Centro Botín), incluye algunas piezas que se exhiben por primera vez y otra creada expresamente para esta ocasión.

Se trata del "Proyecto Frágil", inspirado en la ciudad de Santander, que recrea una ciudad portuaria a través de delgadas láminas de vidrio unidas por imanes.

Y junto a esta gran pieza, una serie no expuesta hasta ahora, "Escala 1:1", que juega con la idea de las reglas que miden la arquitectura urbana y acaban "metamorfoseándose" en edificios.