Madrid, 25 sep.- En el décimo aniversario de la muerte de Adolfo Marsillach, el Ateneo de Madrid ha acogido esta tarde un homenaje al actor y director, al que apenas ha acudido un centenar de personas pero que se ha convertido en un acto entrañable, marcado por las protestas y el cordón policial que rodeaban hoy Las Cortes.
Su viuda, Mercedes Lezcano, su hija Blanca Marsillach y el actor Manuel Galiana han intervenido en el homenaje, presentado por Miguel Losada y Enrique Patiño, responsables de los colectivos organizadores del acto, las Secciones de Cine y Teatro del Ateneo y la Asociación Trotea, respectivamente.
Asimismo, han excusado su presencia por las difíciles condiciones de acceso a la zona -el Ateneo está a pocos metros del Congreso de los Diputados- la actriz Julia Gutiérrez Caba y la otra hija de Marsillach, Cristina.
Actor, director, gestor, escritor y dramaturgo, Adolfo Marsillach murió el 21 de enero de 2002 a consecuencia de un cáncer de próstata diagnosticado en 1996, tras haber trazado una trayectoria de renovación que marcó una época en España, y en la que fundó la Compañía Nacional de Teatro Clásico, el Centro Dramático Nacional y dirigió el Teatro Español, entre otros cargos.
"Es una tarde muy especial. Casi en medio de las bombas... pero merecía la pena estar aquí por uno de nuestros grandes, grandes. Es insólito que no haya habido miles de homenajes, que no se hayan repuesto sus obras, sus películas... No tendríamos el teatro que tenemos sin él", ha subrayado Miguel Losada, del Ateneo de Madrid.
Por su parte, Mercedes Lezcano ha perfilado la personalidad "polémica y combativa" del director y también escritor y dramaturgo, su carácter "comprometido", pero también "coqueto", entre otros calificativos. "Así era Adolfo Marsillach. La persona más elegante que he conocido", ha concluido.
Blanca Marsillach ha recordado a su padre con un hermoso texto escrito por ella misma con motivo de la puesta en marcha de su proyecto en el Teatro Fígaro-Adolfo Marsillach, y que, emocionada, apenas ha podido terminar de leer.
También muy emocionado y con la voz entrecortada ha tomado la palabra Manuel Galiana. "Adolfo nos ha removido a todos. Era enorme", ha recalcado el actor, quien se ha lamentado de un país que "puede olvidar a sus valores". "Gracias a ustedes por haber venido hoy. No olviden nunca a Adolfo Marsillach", ha concluido Galiana.
Enrique Patiño ha coincidido en señalar la "independencia" del fallecido director, así como su carácter disciplinado, decente, honesto, crítico y de gran honestidad. "Sus espectáculos nunca eran vacíos", ha dicho.
"Gracias por empeñaros en organizar este homenaje", ha comentado la hija de Marsillach a los organizadores del acto, que ha concluido con la proyección del último capítulo de la serie de TVE "Ramón y Cajal", protagonizada por el fallecido actor y emitida en 1982.-
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