Nepal acude a sus líderes religiosos para frenar el matrimonio infantil

  • Activistas defensores de los derechos de los niños han pedido ayuda a líderes de distintas religiones en Nepal, con el objetivo de frenar los matrimonios infantiles, una práctica muy extendida en el país del Himalaya.

Manesh Shrestha

Katmandú, 22 sep.- Activistas defensores de los derechos de los niños han pedido ayuda a líderes de distintas religiones en Nepal, con el objetivo de frenar los matrimonios infantiles, una práctica muy extendida en el país del Himalaya.

En una reciente intervención en una conferencia organizada por diversas agencias de la ONU, representantes del clero nepalí dijeron que la práctica está arraigada debido a las necesidades de la sociedad, al analfabetismo, la superstición y la pobreza.

Los líderes religiosos evitaron así vincular el matrimonio a ninguna de las confesiones que tienen fieles en Nepal.

"Los Vedas (escrituras milenarias hindúes) guardan silencio sobre los matrimonios infantiles pero dicen que uno debería casarse después de estar capacitado", aseguró Ram Chandra Bhandari, un gurú del hinduismo, religión de las tres cuartas partes de la población nepalí.

"Aconsejan que uno debería casarse después de convertirse en 'acharya' (título que acredita un cierto conocimiento religioso), algo que es posible después de los 24 o 25 años", agregó Bhandari.

Una opinión similar expresó Nazrul Husain, un líder musulmán, fe del 5 % de la población del país, que defendió que "según el islam, los objetivos del matrimonio solo pueden ser conseguidos como adultos".

Husain subrayó que el islam contempla que la gente se debe casar cuando tiene "una conducta pura", con el fin de que "hombres y mujeres se complementen los unos a los otros para la procreación".

La realidad, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), es que en Nepal el 11 % de la población menor de 14 años de edad está casada y que el 29 % de las niñas de entre 15 y 19 años ya tienen marido.

No obstante, la incidencia del matrimonio infantil, más frecuente en el sur de Nepal que linda con la India, está en declive.

A sus 16 años, Babita Paswan, natural del distrito meridional de Rautahat, no tuvo elección.

Su madre la desposó hace unos meses ante "los problemas económicos" que generó en el hogar la muerte de su padre en un accidente.

"Mi hermana mayor y mi cuñado no querían que me casara pero mi madre me preguntó cómo iba a conseguir comer", explicó a Efe Babita.

Ella es consciente de que no debería haberse casado, cree que cometió un error, pero se resigna y al menos se consuela con que su hermana menor no contraerá matrimonio hasta ser mayor de edad, según ha prometido la madre de ambas.

Para el líder hindú Bhandari, los padres casan prematuramente a sus hijas, generalmente mediante matrimonios concertados, empujados sobre todo por el temor de no poder encontrar un buen marido para ellas cuando se hagan mayores.

Aunque no lo admitió públicamente durante un debate con adolescentes organizado por la ONU a mediados de mes, Bhandari dijo en privado que el matrimonio infantil comenzó después de que regímenes islámicos atacaran Nepal en los siglos XII y XIII.

El clérigo hindú adujo que los musulmanes se llevaron muchas chicas jóvenes, pero dejaron a las mujeres casadas.

Husain, por su parte, defendió que los fieles del profeta Mahoma adoptaron la práctica en Nepal influidos por la tradición hindú.

En Nepal, la edad legal para el matrimonio para hombres y mujeres es 20 años, pero el 23 % de las mujeres dan a luz antes de cumplir los 18 y el 48 % antes de llegar a la veintena o con esa edad, de acuerdo a datos recogidos por Unicef.

"Los líderes religiosos son la gente más poderosa a nivel de comunidad", argumentó a Efe la representante de Unicef en el país del Himalaya, Hanaa Singer, quien añadió que "conocen el lenguaje del corazón".

Así lo piensa Tilak Poudel, un joven de 15 años y del distrito de Surkhet, que durante la mesa redonda dijo a los líderes asistentes que sus consejos pueden ayudar a reducir la incidencia de la práctica, puesto que el pueblo les escucha.

De hecho, tras una campaña lanzada en su distrito, tres aldeas han dejado de celebrar matrimonios infantiles.

A Singer no le preocupa tanto el hecho en sí del enlace matrimonial sino los peligros que entraña ser madre a una edad temprana, pues las adolescentes de menos de 15 años son 15 veces más propensas a morir en el parto que las veinteañeras.

La activista citó un estudio del Centro Internacional de Investigación de Mujeres según el cual en la década que viene 100 millones de menores se casarán antes de los 18 años, la mayoría en el África subsahariana, la India, Bangladesh, Pakistán y Nepal.

Pero como dice Bhandari, en lugar de mirar por qué de producen esos matrimonios, "habría que pensar en cómo detenerlos".

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