Inglaterra, la eterna candidata castigada por las lesiones

  • La selección inglesa afronta la Eurocopa rodeada de incógnitas, con una base predominantemente joven y la eterna vitola de favorita, esta última más bien por nombre que por los últimos resultados cosechados, a los que se han añadido bajas importantes.

Jorge Peris

Londres, 4 jun.- La selección inglesa afronta la Eurocopa rodeada de incógnitas, con una base predominantemente joven y la eterna vitola de favorita, esta última más bien por nombre que por los últimos resultados cosechados, a los que se han añadido bajas importantes.

El equipo de los Tres Leones, con nuevo seleccionador desde el pasado 1 de mayo, el extécnico de Liverpool y West Bromwich Roy Hodgson, ha puesto en marcha una renovación de la plantilla con vista a los próximos años.

Jugadores sin apenas experiencia internacional como Andy Carroll, Danny Wellbeck, Phil Jones o el jovencísimo Alex Oxlade-Chamberlain, que aún no ha sido internacional, deberán guiar a Inglaterra en su primera Eurocopa desde 2004.

Inglaterra está encuadrada en el grupo D junto a las selecciones de Francia, Suecia y Ucrania, donde parte, junto a los "bleus", como principal favorita para una clasificación que a priori no debería ser complicada.

Los ingleses se presentan con un seleccionador que tomó posesión hace poco menos de un mes y una crisis institucional que hace que, pese a los grandes nombres con los que cuenta, las casas de apuestas no los incluyan entre la terna de favoritos, liderada por España y Alemania.

Con el italiano Fabio Capello al frente -dimitió el 8 de febrero-, el conjunto de los Tres Leones realizó una fase de clasificación casi perfecta, con cinco victorias y tres empates en ocho partidos.

En un grupo que incluía a las selecciones de Montenegro, Suiza, Gales y Bulgaria, tan solo los balcánicos fueron capaces de empatar con los ingleses en dos ocasiones, en Londres y en Podgorica.

Inglaterra finalizó el grupo G como líder destacado con 18 puntos, 17 goles a favor y tan solo cinco en contra y superando con facilidad al resto de rivales.

Con la misma base de la Copa del Mundo de 2010, donde Inglaterra fue goleada en octavos de final por Alemania, Capello guió a la selección inglesa a la Euro con un estilo de juego típicamente inglés, basado en balones largos y contragolpes.

Pero a cuatro meses de que diera comienzo la Eurocopa y tras uno de los muchos problemas extradeportivos a los que tuvo que enfrentarse el exentrenador del Real Madrid, la Federación Inglesa (FA) decidió retirar el brazalete de capitán al jugador del Chelsea John Terry por estar supuestamente involucrado en un caso de insultos racistas, lo que provocó la renuncia del italiano al cargo.

Tras varios meses y muchas dudas, la FA decidió confiar en Roy Hodgson, técnico con experiencia en selecciones -entrenó a Suiza, Emiratos Árabes Unidos y Finlandia-, y no en Harry Redknapp, favorito de los aficionados y los medios británicos.

Hodgson, de 64 años, cuenta en su haber con una dilatada experiencia en el fútbol europeo después de haber entrenado en clubes de Suecia, Suiza, Dinamarca, Italia, Inglaterra y Noruega.

Si bien su palmarés no es excesivamente glamouroso -ganó siete ligas suecas, una Copa de Suecia y una liga de Dinamarca, además de finalizar subcampeón de la Liga Europa en dos ocasiones-, Hodgson ha ofrecido resultados en la mayoría de los clubes donde ha entrenado.

El seleccionador de los Tres Leones pondrá en liza su clásico 4-4-2, que se verá modificado durante los dos primeros encuentros del torneo, en los que no podrá contar con su estrella, el delantero del Manchester United Wayne Rooney, sancionado.

Además de por la ausencia de Rooney en los dos primeros choques, las opciones de los ingleses se han visto frenadas tras las lesiones de tres pilares del equipo: Gary Cahill, Gareth Barry y Frank Lampard.

Así, Hodgson formará previsiblemente con Joe Hart en la portería, Glen Johnson, John Terry, Joleon Lescott y Ashley Cole en la defensa, Theo Walcott o James Milner, Scott Parker, Steven Gerrard y Ashley Young en el centro del campo, y Jemain Defoe y Danny Wellbeck en la punta del ataque.

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