La selección española femenina busca pleno que se le escapó equipo masculino

Umag (Croacia), 6 jul.- La selección española femenina de balonmano playa tratará de cerrar hoy la primera fase del Campeonato de Europa que de disputa en Croacia con un triunfo sobre el conjunto anfitrión, que permitiría a las de Pedro Moreno concluir como líder invicto del grupo A.

Una primera plaza que se le escapó al equipo masculino español tras caer el martes por 2-0 ante el gran favorito, la selección croata, vigente campeona continental, en un disputado encuentro en el que los de Francisco Aguilera perdieron en dos disputadas mangas por 20-17 y 15-14.

Derrota que obligará a España a buscar un puesto en los cuartos de final en el durísimo grupo II en el que además del combinado español figuran conjuntos de la talla de Hungría, Noruega, Serbia, Polonia, a quien la selección ya derrotó en la primera fase, y Macedonia.

Precisamente será el equipo balcánico, cuarto clasificado del grupo C, el primer rival del conjunto español en la segunda fase del torneo, que arrancará hoy (12:00) en la localidad croata de Umag, donde España tan sólo ha cedido dos mangas, las perdidas ante Croacia, en los cuatro encuentros que ha disputado.

Una excelente trayectoria, que incita al optimismo de la delegación española, que confía en sellar mañana jueves su pase a los cuartos de final en los tres duelos que disputará con Noruega, Hungría y Serbia.

Cuartos de final que ya tiene asegurados el equipo femenino español, que cuenta hasta el momento por victorias todos sus encuentros de la primera fase, tras imponerse al vigente campeón europeo Italia (2-1), Suiza (2-0), Polonia (2-0), Serbia (2-0) y Macedonia (2-1).

Una inmaculada trayectoria que las de Pedro Moreno pretenden redondear hoy (13:00) ante Croacia, medalla de bronce en el último Europeo disputado hace dos años en la localidad noruega de Larvik.

Duelo en el que el conjunto español se jugará acceder a la segunda ronda del campeonato como primer clasificado del grupo A, lo que le permitiría afrontar la segunda ronda en una posición de privilegio con vistas a los enfrentamientos de cuartos de final.