Los precios de los alimentos engordan de un extremo a otro de la cadena alimentaria. En concreto, según el Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos (IPOD) que elabora mensualmente la organización agraria COAG, en febrero el valor de los alimentos se disparó hasta más de 11 entre el valor en origen y en destino.
En concreto, los limones costaban en los lineales de las tiendas un 1.069% más que el precio pagado a los agricultores en el campo, es decir 11,69 veces por encima, al marcar una cotización de 0,16 euros por kilo en origen y venderse en destino a una media de 1,87 euros.
Por su parte, los ajos multiplicaron por 5,63 su coste desde la cotización en el campo hasta el precio de venta al público en las tiendas, al pasar de cotizar a 1,17 euros por kilogramo en origen para venderse en destino a una media de 6,59 euros por kilo. Igualmente, los precios de los plátanos se revalorizaron 7,81 veces del campo a la mesa, pasando de los 0,26 euros en origen hasta los 2,03 euros en el punto de venta al público, mientras que las lechugas multiplicaron su precio por siete, al pasar de un precio de 0,17 euros por kilo al agricultor a 1,19 euros al consumidor.
Los alimentos que más suben
En general, los productos agrícolas multiplicaron al cierre de enero su precio por 4,68 desde la cotización en el campo hasta el precio de venta al público en los lineales, mientras que los derivados de la ganadería (pollo, cerdo, conejo o huevos) lo hicieron por 3,03.
Por su parte, el precio del kilogramo de ternera pasó de 5,48 euros en origen a 21,05 euros por kilo en los puntos de venta al consumidor, es decir, un 284% más, mientras que en el caso del cordero, su precio se multiplicó un 4,1% más, pasando de los 4,61 euros del kilo en origen a los 18,96 euros en destino, lo que supone 311% más. De este modo, el IPOD de productos agrarios y ganaderos publicado por COAG se situó durante el mes de febrero en 4,33.
