Economía insta a buscar cómo crecer en un futuro en el que Rato ve 20 cajas

Madrid.- El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, pidió hoy al sector financiero que sea capaz de seguir financiando a familias y empresas para que la economía pueda volver a crecer y afronte mejor un futuro en el que el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, ve sólo una veintena de cajas.

A diferencia de la tesis del Banco de España, que advirtió de que el "paro masivo" era el principal problema del sistema bancario español, Campa consideró que la verdadera preocupación es encontrar la fórmula para que éste pueda financiar nuevas empresas, aunque ello resulte "costoso".

Sólo así, dijo, la economía se dinamizará y podrá crear empleo, con lo que el paro bajará y con ello la morosidad, que obliga a las entidades a retraer parte de sus recursos para cubrir posibles impagos.

Sin embargo, para recuperar la senda de crecimiento, será necesario un sistema financiero "solvente y capaz de canalizar la financiación correctamente", por lo que el secretario de Estado pidió que se acometa la reordenación del sector.

Esa petición la hizo durante su intervención en el "XVII Encuentro del sector financiero" organizado por Deloitte, ABC y la Sociedad de Tasación, acto en el que participaron entre otros el ex director gerente del FMI y presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato.

En su discurso, el ex ministro expuso una tesis similar a la de Campa sobre la necesidad de reordenar el sector para que el crédito financie la economía cuando empiece su recuperación, aunque no sin criticar las "prisas" de algunos.

En palabras de Rato, el "gran riesgo" de España es que se dé la situación de que la economía "quiere tirar pero no haya gasolina en los surtidores", con lo que se podría repetir el caso de Japón, con un crecimiento económico estancado durante años.

De ahí la importancia de ajustar el sector financiero en un proceso que Rato alarga durante varios años, ya que divide la reordenación en varias etapas y ve reducido el número de cajas desde las 45 actuales hasta una veintena después de 2011.

Una reducción mayor que la que prevé CECA, la patronal de las cajas, ya que según su director general, José Antonio Olavarrieta, quedarán unas "25 ó 27".

Eso sí, para llegar a esa cifra Olavarrieta pidió al Gobierno que incluya más modificaciones en la regulación sobre los Sistemas Institucionales de Protección (SIP), con los que se crean las denominadas fusiones frías o virtuales.

No obstante, las cajas valoran las aclaraciones recientemente introducidas pero demandan que una "agrupación de cajas" pueda ser la entidad central que aglutine a varias cajas, ya que hasta ahora sólo se permite que sea un banco o una caja participada por el resto de entidades que forman el SIP.

Además, tanto la CECA, como Rato o el director general de La Caixa, Juan María Nin, advirtieron de las consecuencias que tendrá el nuevo "tsunami" regulatorio, que exigirá mayores niveles de capital.

Rato cree que se traducirá en un nivel de capital de mayor calidad -"core capital"- próximo al 8%, algo que no está "muy lejano" de la marca actual, aunque no por ello descartó que se estudien nuevas fórmulas para captar recursos.

Pero el ex ministro no concretó si la vía más adecuada sería la emisión de cuotas participativas con derechos políticos, de los que por el momento no disponen este tipo de valores similares a las acciones.

Y es que las exigencias de capital para todo el sector español, tanto bancos como cajas, será de 48.000 millones, a lo que hay que sumar 300.000 millones en liquidez adicional, según Nin.

En la jornada también participó el presidente de Cajastur, Manuel Menéndez, quien anunció que la integración con el grupo de Caja Castilla La Mancha (CCM) habrá concluido en un mes.