El gobierno cree que merkel se quedará sola en el g-20 y dará un giro a las políticas de la ue

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cree que la cumbre del G-20, que arranca este lunes en Los Cabos (México), servirá para demostrar que Alemania está prácticamente sola en el empeño de mantener políticas restrictivas en la Unión Europea y, por lo tanto, provocará un giro hacia posiciones más solidarias con los países en problemas.
Fuentes gubernamentales aseguraron a Servimedia que la canciller de Alemania, Angela Merkel, puede sentirse arrinconada en la cumbre de los principales líderes mundiales ante las numerosas peticiones que van a ponerse sobre la mesa para que la UE abra el grifo y ayude a salir del pozo a las economías que atraviesan más apuros.
Rajoy confía en la presión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para que Merkel cambie de actitud y acepte, entre otras cosas, que el Banco Central Europeo (BCE) inyecte liquidez en los mercados mediante la compra de deuda de España e Italia, lo que rebajaría la presión de la prima de riesgo.
El Gobierno espera que el BCE intervenga, especialmente tras el resultado de las elecciones griegas de este domingo, con la aportación de miles de millones de euros que darían un respiro a las naciones que generan más inquietudes y lanzarían al mismo tiempo un mensaje de fortaleza de la UE.
PINZA ENTRE OBAMA Y HOLLANDE
Rajoy es consciente de que Estados Unidos se ha sumado en las últimas semanas al grupo de países interesados en que la UE disipe las dudas surgidas sobre el proyecto comunitario y pueda comenzar a crecer. De hecho, Obama ha apuntado que el freno que está sufriendo su economía se debe en gran medida a la recesión europea, que provoca una disminución de las exportaciones al viejo continente.
El papel de Obama, junto a la reivindicación del francés François Hollande para impulsar políticas de crecimiento, será una de las claves de la cumbre para enviar un mensaje positivo al mundo entero sobre la solidez del futuro de la UE, según subrayaron las mismas fuentes.
Para recuperar la credibilidad y fortaleza de la UE, el Gobierno español cree que también se dará un impulso al proyecto de construcción comunitaria, con un compromiso hacia la unidad fiscal y bancaria que deberá concretarse, posteriormente, en Bruselas durante la cumbre del Consejo Europeo que tendrá lugar los días 28 y 29 de junio.
Aunque en La Moncloa siempre se ha sentido muy cerca de las posiciones de restricción del gasto de Angela Merkel, en las últimas semanas le afean que haya impedido que el Banco Central Europeo interviniera en las economías mediante inyecciones de crédito que habrían rebajado las presiones de los mercados.
Las fuentes consultadas indicaron a Servimedia que Rajoy acude con tranquilidad a la cumbre del G-20 a pesar del rescate a los bancos aprobado el pasado fin de semana y de la tensión de la prima de riesgo, que durante los últimos días ha sobrepasado en varias ocasiones la barrera de los 550 puntos.
El Ejecutivo asegura que las reformas emprendidas en los primeros cinco meses de mandato y esos 100.000 millones de euros de línea de crédito que van a estar a disposición de los bancos con problemas conceden a España margen suficiente para proseguir con sus planes.