Personalidades lusas piden alargar plazos de deuda como hizo Alemania en 1953

  • Exministros lusos con gobiernos de diferente signo, economistas, historiadores y líderes patronales y sindicales evocaron el caso de Alemania tras la II Guerra Mundial para pedir más tiempo para que Portugal pague su deuda.

Lisboa, 12 mar.- Exministros lusos con gobiernos de diferente signo, economistas, historiadores y líderes patronales y sindicales evocaron el caso de Alemania tras la II Guerra Mundial para pedir más tiempo para que Portugal pague su deuda.

En un manifiesto publicado hoy, los setenta firmantes solicitan al Gobierno luso y a los organismos internacionales que analicen las posibilidades de una "reestructuración de la deuda" que acumula el país, equivalente ya al 130 % de su economía y que implique un alargamiento de los plazos.

Entre quienes apoyan el documento se encuentran la antigua líder del hoy gobernante Partido Social Demócrata (PSD, centro derecha), Manuela Ferreira Leite, y el antiguo secretario general del Partido Socialista (PS), Eduardo Ferro Rodrigues.

Antiguos ministros con Gobiernos conservadores como António Bagao Félix o António Capucho y socialistas como Joao Cravinho o José Silva Lopes también abogan por este alargamiento de los plazos de la deuda.

El actual líder de la patronal, António Saraiva, el hasta hace poco más de un año representante del principal sindicato del país, Manuel Carvaho de Silva, el historiador Fernando Rosas o los economistas José Reis y Francisco Louça -que formaron parte de la fundación del marxista Bloque de Izquierda- defienden este texto.

El manifiesto ha instalado en la agenda política el debate sobre el actual nivel de deuda, que en opinión de los firmantes no es sostenible debido "a la ausencia de un crecimiento significativo prolongado", algo que consideran improbable en un contexto de austeridad como el que vive el país.

Hoy mismo, el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, reconoció que las políticas de ajuste deberán continuar una vez Portugal cierre su programa de asistencia financiera, en mayo, con el objetivo de cumplir las metas de reducción del déficit público acordadas con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En el documento se argumenta que sin una reestructuración, el Estado "continuará enredado en la tentativa de resolver los problemas de déficit y de deuda por la única vía de la austeridad", lo que impediría "canalizar recursos suficientes" para impulsar un crecimiento fuerte y recuperar el empleo y la inversión con el propósito de frenar la emigración de jóvenes altamente cualificados.

Los firmantes destacan que Portugal debe reembolsar a los inversores deuda por valor de 48.000 millones de euros sólo hasta 2017, lo que equivale casi a una tercera parte del PIB nacional.

Además, recuerdan que los intereses que paga el país por su deuda absorben el 4,5 % del PIB y que casi la mitad del incremento de la deuda pública registrado en los últimos años se debe al efecto precisamente de estos intereses.

Las personalidades lusas que apoyan el texto justifican su postura con el caso de Alemania, cuyo "milagro económico" se sustenta "según reputados historiadores germanos" en el perdón acordado en 1953 de una parte de la deuda contraída antes y después de la II Guerra Mundial así como en la rebaja de los intereses de la deuda restante.

"Reino Unido, que alargó durante décadas el pago de sus deudas, ofrece otro ejemplo, y ya en la zona euro se estudian plazos de 50 años para Grecia", reza el documento.

El líder del Gobierno luso, Pedro Passos Coelho, rechazó de plano cualquier hipótesis de "reestructuración" y advirtió del riesgo que conllevaría para el país dar motivos de preocupación a los inversores cuando apenas faltan dos meses para cerrar el rescate.

Medios lusos destacan la heterogeneidad de los firmantes del manifiesto y aseguran que entre ellos hay varias personas cercanas al jefe del Estado luso, Aníbal Cavaco Silva, quien por el momento no se ha posicionado al respecto.

Mostrar comentarios