Polariza el debate sobre el alquiler

El gobierno portugués llevará adelante su plan de vivienda pese al veto presidencial

Sin embargo, los socialistas aseguran que avanzarán con su programa pese al veto presidencial: "Reafirmamos la urgencia de la crisis de vivienda" y que va a usar su mayoría absoluta para sacar adelante, "tal como está". 

Marcelo Rebelo de Sousa
El presidente de Portugal bloquea el plan de vivienda impulsado por los socialistas
EFE

Los planes de vivienda no sólo ha generado controversia en España, sino que Portugal también ha implementado una nueva normativa que no tiene el visto bueno del presidente luso. Así lo han informado desde el país vecino, donde aseguran que el actual mandatario, Marcelo Rebelo de Sousa, ha vetado el principal diploma del plan de vivienda impulsado por la mayoría absoluta socialista del país, que incluía normativas similares a las españolas. Entre ellas el alquiler forzoso a casas desocupadas o limitaciones a los apartamentos turísticos. 

En una carta remitida al Parlamento y divulgada este lunes por la Presidencia lusa, Rebelo de Sousa alegó que, "en términos simples, no es fácil ver de dónde vendrá la prometida oferta de casa para la vivienda con eficacia y rapidez". "Ni en el alquiler forzoso, ni en el alojamiento local, ni en la implicación del Estado, ni en su apoyo a las cooperativas, ni en los medios concretos y plazos de actuación, ni en la ausencia total de un régimen de acuerdo o de mínimo consenso partidario, este diploma es suficientemente creíble en términos de su ejecución a corto plazo", añadió.

Criticó además que la presentación de este paquete "acabó por polarizar" el debate sobre el alquiler forzoso y el alojamiento local, "apagó otras propuestas y medidas" y "volvió muy difícil un deseable acuerdo de régimen sobre vivienda, fuera y dentro de la Asamblea de la República".

El programa, presentado en febrero para dar respuesta a la crisis de vivienda en Portugal y con una inversión estimada de 900 millones de euros, fue aprobado en el Parlamento a finales de julio con el voto a favor únicamente de los socialistas, que gobiernan con mayoría absoluta, y tras incluir una docena de propuestas de otros partidos. Aun así no había logrado acallar las críticas por parte de partidos de la oposición, alcaldes, asociaciones y hasta del presidente luso, que hace semanas avanzó que le parecía "inoperativo".

Entre las medidas más criticadas está el alquiler forzoso de viviendas desocupadas, aunque no se incluyen las viviendas de vacaciones, las de emigrantes o las que estén vacías porque el propietario está prestando cuidados a un familiar o fuera por razones profesionales, de salud o formativa. También querían limitar los apartamentos turísticos y suspender las nuevas licencias, a excepción de zonas rurales, archipiélagos de Madeira y Azores y municipios y barrios de "baja densidad".

Los apartamentos turísticos tendrían que pagar un impuesto especial, que se fijaría en el 15%, y se acabaría además el régimen de Golden Visa, que concede la residencia a cambio de inversiones, entre otras medidas. El acceso a la vivienda se ha convertido en un problema en Portugal, donde los precios han aumentado casi un 75% en la última década.

Los socialistas se defienden

El Partido Socialista (PS) de Portugal anunció que va a usar su mayoría absoluta para sacar adelante, "tal como está", el principal diploma de su plan de vivienda, con el que planea hacer frente a la crisis habitacional que sufre el país, tras el veto presidencial. "Reafirmamos la urgencia de la crisis de vivienda y esta urgencia nos lleva a que el grupo parlamentario del PS, en el inicio de los trabajos parlamentarios en septiembre, dé los pasos necesarios para la confirmación del diploma del programa", afirmó el portavoz del grupo parlamentario socialista, Eurico Brilhante Dias.

Respondía así a la decisión divulgada hoy del presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, de vetar la norma, al considerar que "no es fácil ver de dónde vendrá la prometida oferta de casa para la vivienda con eficacia y rapidez". Brilhante Dias, que dijo "respetar" la decisión del mandatario, alegó a los periodistas en el Parlamento que "no hay una bala de plata que resuelva este problema de un día para otro" y que el PS ha tenido en cuenta las propuestas de otros partidos a la hora de redactar el diploma.

“El PS siempre fue el equilibrio entre el radicalismo de mercado de la derecha y el radicalismo estatista de la izquierda”, insistió. Aseveró además que este programa "nació como una respuesta inmediata, coyuntural, a un problema que tiene raíces estructurales y por eso tiene respuestas estructurales siendo diseñadas".  En una misiva remitida al Parlamento, Rebelo de Sousa alegó que la norma no es "suficientemente creíble en términos de su ejecución a corto plazo". 

Entre las medidas que quiere impulsar el PS con este diploma está el alquiler forzoso de ciertas viviendas desocupadas, la limitación de los apartamentos turísticos y la suspensión de nuevas licencias que no sean en zonas de "baja densidad". Los apartamentos turísticos tendrán que pagar un impuesto especial, que se fijaría en el 15%, y se acabará además el régimen de Golden Visa, que concede la residencia a cambio de inversiones, entre otras medidas. Según la legislación portuguesa, si el texto es aprobado por mayoría absoluta en el Parlamento, será remitido de nuevo al presidente para su promulgación. El acceso a la vivienda se ha convertido en un problema en Portugal, donde los precios han aumentado casi un 75% en la última década.

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