Reforma laboral. Ugt haría coincidir la huelga con el trámite parlamentario de la reforma


El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, afirmó este jueves que, si finalmente los sindicatos convocan un huelga general, ésta coincidirá con el trámite parlamentario de la reforma laboral.
En una entrevista en Servimedia, Ferrer explicó que los órganos de dirección de las centrales sindicales se reunirán el próximo 9 de marzo para decidir la convocatoria de nuevas movilizaciones y “para examinar la posibilidad de convocar una huelga general durante el periodo de tramitación de la reforma”.
El dirigente de UGT insistió en que su organización prefiere seguir apostando por el diálogo, pero advirtió de que, si el Gobierno no accede, “nos veremos obligados” a convocar la huelga general “en una fecha que iremos determinando”.
“Preferimos abrir el espacio de negociación antes que el de huelga”, insistió Ferrer, pero agregó que la apertura de ese proceso dependerá del Gobierno. “Si no se produce la negociación, tendremos que dar una respuesta”, subrayó.
También denunció que los líderes de UGT y CCOO, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, enviaron una carta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para abrir este proceso de negociación, pero “no ha habido respuesta ni oficial ni oficiosa”.
Uno de los puntos que los sindicatos quieren modificar durante ese hipotético proceso de diálogo con el Ejecutivo es la parte de la reforma que atañe a la negociación colectiva.
En este caso, Ferrer defendió el acuerdo sobre negociación colectiva y moderación salarial firmado entre las organizaciones sindicales y empresariales que, en su opinión, el Gobierno no ha respetado. Para el número dos de UGT, la reforma rompe con todo lo acordado entre los interlocutores sociales y “sólo queda el sacrificio salarial”.
Preguntado sobre si, en el caso de que haya una huelga general, se sentirán cómodos si se suman algunos partidos políticos, como el PSOE, Ferrer subrayó que “lo que pretendemos es que la convocatoria sea lo más amplia posible”, aunque “manteniendo nuestra autonomía”.
Así, apuntó que la política del Ejecutivo no supone sólo “una agresión en materia laboral”, sino que afecta a toda la sociedad, por ejemplo con los recortes en sanidad o educación. Por esta razón consideró que sería “positivo” que se sumaran partidos políticos, pero insistió en la necesidad de mantener la autonomía de las organizaciones sindicales.

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