Donó su dinero a su colegio

La secretaria que se hizo millonaria en secreto: tenía seis millones al jubilarse

Billetes de euro.
Billetes de euro.
Lukasz Radziejewski de Pexels.

Desempeñar un empleo con un sueldo medio sirve para llegar a ser millonario. Esta enseñanza se saca del curioso casa de Grace Groner, una mujer que trabajó toda su vida como secretaria en la empresa americana Abbott Laboratories, pero que cuando se jubiló acumuló una fortuna de 7 millones de euros.

Pocos lo sabían o pocos lo sospechaban dado que Grace llevó una vida muy sencilla. Nunca se casó ni tuvo hijos y vivió siempre en una vivienda de un dormitorio. Tampoco era propietaria de un coche.

Por ello, cuando falleció en 2010 con 100 años, los responsables del centro educativo Lake Forest College se quedaron boquiabiertos al recibir 6 millones de euros donados por Grace en su testamento para becas, estudios internacionales y otros proyectos. Grace había estudiado allí y estaba muy ligada al centro, según informa 'The Motley Fool'.

Pero... ¿cómo una mujer con una vida humilde y un sueldo medio pudo amasar tal fortuna? La respuesta radica en lo que los expertos definen como la 'magia' del interés compuesto.

El método de Grace Groner para ser millonaria

El denominado como interés compuesto se basa en la inversión a largo plazo. Básicamente son los intereses que se van generando sobre los que vamos obteniendo. Por ello, cuanto más ganancias se generen anualmente sobre un dinero, más beneficio se obtendrá de forma progresiva.

Grace ahorró todo lo que pudo de su sueldo e invirtió ese dinero en acciones y fondos del mercado bursátil. Después dejó al interés compuesto hacer el resto.

En este sentido, los expertos señalan que con un interés del 5% al año, un interés compuesto que trabaje durante 30 años da lugar a un 72,88% más del dinero invertido en un inicio.

Grace invirtió en acciones que le dieron dividendos, los cuales reinvirtió. Invirtió y siguió invirtiendo, permitiendo al interés compuesto trabajar a lo largo de los años.

Las primeras acciones que Grace compró fueron tres, y eran las de su empresa Abbott Laboratories. Con ellas permaneció hasta el final de sus días, dado que daban altos dividendos sin importar la situación económica del país. Así estuvo durante 75 años y así generó su fortuna.

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