Zapatero busca proyectar certidumbre económica con el anticipo electoral

  • El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy que adelanta las elecciones para proyectar certidumbre económica, una vez que las bases de la recuperación están "encauzadas".

Madrid, 29 jul.- El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy que adelanta las elecciones para proyectar certidumbre económica, una vez que las bases de la recuperación están "encauzadas".

"Las bases de la recuperación están sentadas, aunque habrá que continuar la tarea", ya que "aún falta tiempo" para alcanzar el ritmo deseado y que el incipiente crecimiento se traduzca en una fuerte creación de empleo, resumió Zapatero al anunciar los comicios del próximo 20 de noviembre.

Además, mantener la "tensión permanente" en el control del gasto sigue siendo una exigencia, pese a considerar el presidente ya "encauzado" el proceso de consolidación fiscal, que obliga a que el déficit a final de año no suba por encima del 6 % del PIB.

El principal problema para cumplir esta expectativa es el exceso de deuda y de gasto de las Comunidades Autónomas, que no deberían superar un déficit del 1,3 % en todo 2011.

Dichas dificultades están detrás de la amenaza que lanzó hoy mismo la agencia de medición de riesgo Moody's de rebajar por tercera vez la calificación de la solvencia de España, que Zapatero confió en no ver cumplida.

En este contexto, junto al anuncio de adelanto electoral el jefe del Gobierno anticipó un "esfuerzo adicional" en agosto, con la aprobación un decreto-ley para mejorar la recaudación del Impuesto de Sociedades y reducir el coste farmacéutico.

Según los datos de ejecución presupuestaria presentados ayer, la recaudación por Sociedades ha caído hasta junio de 2011 el 15,6 % respecto al año anterior, hasta los 4.006 millones de euros.

En cuanto al gasto farmacéutico, la semana pasada el Ejecutivo y las comunidades en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, llegaron a acuerdos que permitirán un ahorro en el gasto farmacéutico estimado en más de 2.000 millones de euros anuales.

Zapatero aseguró que el adelanto electoral responde al interés general, no tiene una lógica partidista, y lo tenía ya pensado y madurado desde hace tiempo para proyectar certidumbre política y económica.

Es "lo natural" y "razonable", entre otras cosas porque está en marcha la mayor parte de las reformas económicas previstas, en particular la relativa a las pensiones, aprobada por el Congreso la pasada semana.

Además, la fecha ha sido elegida para que el nuevo Gobierno pueda estar ya en funcionamiento el día 1 de enero y se encargue desde el principio de las medidas que considere oportuno aplicar en el terreno económico.

Tendrá que hacerlo con unos presupuestos prorrogados, porque el jefe del Ejecutivo certificó la evidencia de que su actual Gabinete no preparará unas nuevas cuentas del Estado para el próximo año.

Las reacciones del mundo económico al adelanto electoral han sido en general positivas.

El presidente del BBVA, Francisco González, consideró que es una buena noticia porque "España necesita un Gobierno fuerte que tome decisiones que le sitúen otra vez a la altura de los países más importantes de Europa".

En esta línea, el presidente de CEIM Confederación Empresarial de Madrid-CEOE, Arturo Fernández, opinó que el país necesita un Ejecutivo que "le devuelva la credibilidad y la confianza" que está "perdiendo cada minuto".

El sindicato CCOO resaltó que esto era lo mejor que podía pasar debido al agotamiento del Gobierno y a los "disparates" cometidos con la validación de la negociación colectiva.

Por su parte, UGT confió en que el proceso de elecciones se oriente hacia la recuperación económica y la creación de empleo.

Según el presidente del PP, Mariano Rajoy, las elecciones generales son "el impulso" y "el caudal de confianza" que necesita España para salir de la "grave situación actual".

Pero para Moody's la convocatoria adelantada no resolverá todas las incertidumbres que afectan a la deuda soberana, ya que lo "crítico", a su juicio, es lo que hagan los países del euro para resolver la crisis de confianza sobre su unidad de acción. EFE

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