Primero llegó el golpe y ahora, las consecuencias. El gigante de los alojamientos turísticos Airbnb despedirá a 1.900 empleados en todo el mundo después de la dura crisis causada por la pandemia del coronavirus. Es un 25% de toda la plantilla. La compañía busca centrarse en las actividades relacionadas con su actividad principal, abandonando otras áreas secundarias como el transporte, los hoteles o el lujo.
La compañía ya alertó el pasado mes de abril de las consecuencias que estaba teniendo la pandemia, con las restricciones a la movilidad de la población mundial. En unas previsiones adelantadas por el medio especializado The Information, aseguraba que los ingresos caerían más de la mitad hasta los 2.200 millones de dólares en 2020. Ante esta tesitura, la firma levantó 2.000 millones de dólares en deuda y capital de algunos inversores relevantes. "Si bien esto fue necesario, quedó claro que tendríamos que ir más allá cuando enfrentáramos dos verdades incómodas: no sabemos cuándo volverán los viajes y cuando regresen, éstos serán diferentes", ha asegurado Brian Chesky, cofundador y CEO de Airbnb en una carta pública este martes.
En este contexto, el directivo ha anunciado el despido de unos 1.900 empleados, lo que representa el 25% de la plantilla total que suman 7.500 en todo el mundo. "Como no podemos permitirnos hacer todo lo que solíamos hacer, estos recortes tienen el objetivo de centrarse en un negocio más enfocado", ha apuntado. Sobre esto ha asegurado que reducirán su inversión que no se centre exclusivamente en su actividad original de alojamientos.
En España se desconoce la cifra total de salidas que se ejecutarán. La plantilla, a cierre del ejercicio 2018 (último disponible en el Registro Mercantil), la filial local -que actúa como comisionista de la matriz en Irlanda- contaba con una plantilla de algo más de 30 personas. A finales de 2018 abrió un centro de atención y soporte de viajeros y anfitriones, con un equipo de unas 800 personas. El servicio era subcontratado a la multinacional CPM. El contrato con esta empresa se rescindió hace unos días.
A los que son despedidos, según ha informado Chesky, se les pagará como indemnización un total equivalente a 14 semanas de trabajo (3 meses y dos semanas), junto con una semana de salario por cada año trabajado. A esto suma también doce meses de seguro de salud.
Las cifras de la compañía
Airbnb estaba llamado a ser uno de los grandes 'unicornios' tecnológicos que aterrizaran en la bolsa. Después de años de especulación -y alguna batalla en la cúpula- el gigante del sector turístico dio marcha atrás y pospuso el estreno. Las cifras de 2019 no invitaron al optimismo. Según adelantó The Wall Street Journal el pasado mes de febrero, durante los nueve primeros meses de 2019 sufrió unas pérdidas de 322 millones de dólares frente a los beneficios de 200 millones en el mismo periodo de 2018.
Estas dificultades se han visto también reflejadas en la valoración de la empresa. Era una de las más valoradas en este mercado. Sin embargo, las rondas de capital y deuda que tuvieron lugar el pasado mes de abril rebajaron un 40% esa cifra: de 31.000 millones de dólares a algo más de 18.000 millones.
En su accionariado están algunos de los fondos más emblemáticos de Silicon Valley y también algún gran banco de Wall Street. Entre los inversores más destacados despunta Sequoia Capital o Andreessen Horowitz, junto con el fondo de Google, Kleiner Perkins o Temasek. En total, la compañía ha levantado más de 5.400 millones de dólares en las diferentes rondas de financiación ejecutadas desde su fundación en 2008.
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