Ibercaja bate al sector: un 45% del ahorro de clientes es del que genera comisiones

  • El banco gana 80,7 millones hasta septiembre, cuantía que se reduce un 26,5% por el coste del Ere y aumentaría el 20,4% sin dicho cargo extraordinario
Ibercaja 'convierte' en digital a un tercio de sus clientes con Microsoft
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Con los tipos de interés hundidos a cero, la pugna por abrirse camino en productos como los fondos de inversión y seguros, que generan ingresos a la cuenta, está servida. En este empeño, Ibercaja ha conseguido que la gestión de activos y seguros de vida represente ya el 45% de los recursos de clientes. Son 25.181 millones de euros administrados a cierre de septiembre, después de crecer un 11,9% interanual, si bien el beneficio no recoge el empuje de esta rentable actividad por los costes para prejubilaciones.

La entidad ganó 80,7 millones entre enero y septiembre o un 26,5% interanual menos porque destinó 71,6 millones a costear parte del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) aprobado este año para mejorar la rentabilidad, eficiencia y adaptando la red al proceso de transformación digital promoviendo 500 salidas y 140 clausuras de sucursales.

Los recursos de clientes crecen un 3,8% interanual o en 2.074 millones, hasta alcanzar los 55.969 millones gestionados. La partida con mayor peso es el ahorro a la vista, que crece un 17,4% y alcanza los 23.376 millones; pero seguido por los recursos gestionados en activos y seguros de vida -suben un 11,9%, hasta 25.181 millones-. Los depósitos a plazo caen en contraste un 35,5% y se reducen a 7.412 millones, en línea con la tendencia del sector desde que hayan casi desaparecido sus remuneraciones.

Que suponga un 45% del ahorro de clientes administrados es un umbral por encima del promedio del sector que, según subraya la entidad, “constituye una ventaja competitiva en el entorno actual de bajos tipos de interés y estrechos márgenes de intermediación bancaria”. Un resultado directo es que su capacidad de recaudación por comisiones avanza un 8,5% y suma casi 270 millones a la cuenta, contrarrestando el descenso del 2,1% en el margen financiero por los tipos a cero y el desapalancamiento de familias y empresas; y que la partida de resultados por operaciones financieras disminuya también un 60,8%.

Sin embargo lo deslucen los extraordinarios: no cuenta con los 69,3 millones en plusvalías que el pasado año se anotó con la venta del servicer inmobiliario y los gastos del Ere le detraen 71,6 millones, aunque la mejora de la calidad de los activos le ha permitido reducir la partida de provisiones un 66% desde 286,8 a 98 millones de euros.

El crédito problemático se redujo un 10,9% o en 526 millones, reduciendo la tasa de morosidad al 7,9% frente al 8,6% de promedio sectorial. En parte por la venta de 214 millones en activos adjudicados, cuya desinversión se incrementa así un 27%, mientras que incentiva la nueva financiación. La concesión de crédito superó los 4.000 millones, lo que implica un incremento del 4,1% durante el mismo periodo del pasado ejercicio, aunque el saldo en stock aún sufre el desapalancamiento de la economía y retrocede un 1,8%.

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