Sergio Vélez, director general 

Los fondos nombran a Rafael Villaseca y Jordi Cazorla para la nueva etapa de Celsa

Los nuevos accionistas han reforzado el balance de la empresa mediante la capitalización de 1.400 millones de euros de deuda convertible y deuda jumbo.

Rafael Villaseca
Los fondos nombran a Rafael Villaseca y Jordi Cazorla para la nueva etapa de Celsa. 
Europa Press

Los fondos apuestan por Rafael Villaseca como presidente no ejecutivo y por Jordi Cazorla como consejero delegado del grupo para gestionar la nueva etapa en Celsa, la cual da comienzo después de que las entidades acreedoras tomaran el control de la compañía. Según ha informado la empresa y recoge Efe, Sergio Vélez llevará a cabo las funciones de director general. Además, los nuevos accionistas han reforzado el balance de la compañía mediante la capitalización de 1.400 millones de euros de deuda convertible y deuda jumbo.

Villaseca fue consejero delegado de Gas Natural Fenosa (en la actualidad Naturgy) de 2005 a 2018, y ahora es presidente de la Fundación Naturgy y consejero de Cementos Molins y VidaCaixa. Cazorla, ingeniero industrial por la UPC y MBA por la UB, ha sido director general de Ds Smith para el sur de Europa y antes ocupó posiciones directivas en Ideal Standard, American Standard, General Electric y Hewlett Packard.

Hasta que Cazorla se incorpore a la compañía, el director general será el responsable de FTI Consulting España, Sergio Vélez; y el abogado del Estado Daniel Alaminos será el secretario del consejo de administración.

Los nuevos consejeros independientes 

Mientras se aguarda la designación definitiva del consejo, se incorporan de manera provisional cuatro consejeros independientes: María Esther Alfonso, Antonio Arenas, Francisco Javier Díaz-Gálvez y Luis Aurelio Martín. Con estos nombramientos "se inicia una nueva etapa que supone un punto de partida para consolidar el liderazgo de Celsa en el sector", ha destacado Villaseca.

Estos nombramientos se producen en aplicación del plan de reestructuración aprobado en septiembre por sentencia judicial, "que permitirá a Celsa reducir su deuda en 1.400 millones y ampliar en 5 años el vencimiento de la deuda restante, dejando a la compañía con una situación financiera muy mejorada", explica en un comunicado.

La operación ha incluido la aceptación por parte de los nuevos accionistas de "una serie de compromisos con las autoridades, entre los que destacan el mantenimiento de la viabilidad de la compañía a largo plazo, la toma de decisiones del grupo en España y la protección del empleo y la capacidad productiva".

Mostrar comentarios