Al ritmo de la recuperación del tráfico aéreo, el grupo aéreo IAG presenta un beneficio neto de 2.655 millones de euros en 2023, que multiplica por seis los 431 millones registrados en el año anterior, cuando la compañía volvió a ver beneficios tras las pérdidas del Covid. Apoyado en la alta demanda de viajeros del transporte aéreo, especialmente aquellos relacionados con el ocio turístico, la entidad se anotó un beneficio operativo antes de impuestos de 3.507 millones, en contraste con los 1.278 millones registrados en 2022.
Tras dar a conocer sus cuentas, el consejero delegado del grupo, Luis Gallego, ha querido destacar el crecimiento de sus beneficios y el margen de explotación "que aumentaron más del doble en comparación con 2022". Una mejora, que Gallego atribuye a la recuperación de la capacidad, que "se recuperó hasta acercarse a los niveles previos a la Covid-19" en la mayoría de los principales mercados que operan sus compañías.
De cara a este año, la compañía pone el foco en "implementar la estrategia, generando valor en el negocio a largo plazo". En esta línea, su CEO explica que sus planes de crecimiento pasan por "fortalecer las aerolíneas y desarrollar IAG Loyalty, así como otras oportunidades de crecimiento poco intensivas en capital". Al tiempo, el grupo de aerolíneas espera generar un flujo de caja libre "significativo" durante 2024, antes del efecto favorable de cualquier operación de arrendamiento y sin pagos adicionales de pensiones o amortizaciones significativas de deuda este año.
Avanza que invertirá alrededor de 3.700 millones este año, con lo que busca reforzar la cartera y afianzar sus posiciones de liderazgo en mercados muy atractivos, con crecimientos a largo plazo en particular en el Atlántico Norte, Atlántico Sur y el doméstico español.
Los resultados de la matriz de Iberia, el grupo IAG, llegan en un momento clave de la compañía que quiere hacerse con el control de Air Europa. Para ello, ya ha remitido a la Comisión Europea su plan de correcciones para obtener el visto bueno de la institución comunitaria a la compra de la aerolínea, según se recoge en el directorio de fusiones del departamento que dirige la danesa Margrethe Vestager. La aerolínea británica remitió el plan de compromisos o 'remedies' en la jerga comunitaria el pasado viernes, 23 de febrero, después de que Bruselas anunciara un mes antes la apertura de una investigación en profundidad sobre la operación.
El plan de compra fue notificado el 11 de diciembre de 2023 a Bruselas, que dispone de 90 días hábiles, es decir, hasta el 7 de junio de este año para tomar una decisión, aunque tiene la opción de parar el reloj con prórrogas de entre 15 o 20 días hábiles. Las autoridades de Competencia del Ejecutivo comunitario tienen hasta esa fecha para pronunciarse al respecto y durante este tiempo evaluará si las correcciones enviadas por IAG son suficientes para resolver el impacto negativo sobre los precios y la calidad de los servicios que Bruselas había identificado previamente.
