Iberdrola ha lanzado un bono híbrido verde con el que pretende colocar en torno a 1.000 millones de euros para refinanciar otro bono de las mismas características emitido en 2013 y que vence en febrero de 2018, informaron a Europa Press en fuentes del mercado.
Las mismas fuentes destacaron que las condiciones del mercado son muy favorables para la colocación de este bono perpetuo no convertible en los primeros 5,5 años.
Iberdrola realizará su sexta emisión de este tipo de producto destinado a financiar proyectos de energías renovables o redes y ha dado mandato a HSBC y CA-CIB para que actúen como entidades globales en una operación en la que también participan Santander, BBVA, Barclays, Unicredit, BNP Paribas, JP Morgan, ING o MUFG.
El pasado 6 de septiembre, Iberdrola cerró su sexta emisión de bonos verdes por un importe de 750 millones de euros, con vencimiento a 10 años y cupón del 1,25%, que fue colocada a grandes inversores internacionales, con gran presencia de inversores 'verdes'.
Los fondos obtenidos, cuya utilización responsable fue validada por la agencia independiente Vigeo Eiris, se destinarán a financiar y refinanciar inversiones de parques eólicos onshore en Reino Unido y offshore en Alemania.
Además, el grupo suscribió con BBVA a finales de 2016 el primer préstamo verde realizado en el mundo para una compañía energética, por valor de 500 millones de euros. De esta forma, Iberdrola se consolida como actor de referencia internacional en este tipo de financiación.
Los proyectos a los que se destinan los recursos obtenidos están alineados con los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, que Iberdrola ha incorporado a su estrategia: el de energía Asequible y no contaminante y el de producción y consumo responsables.
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