Mismo guión, aunque con mayor aceleración. Indra cierra los tres primeros meses del año con una subida más intensa de los ingresos (22%) y también del beneficio neto (40%). El crecimiento de defensa, con el programa europeo del Fcas impulsando las cifras, y el resultado de las adquisiciones ejecutadas durante los últimos trimestres han tenido peso importante en estos resultados. El grupo reafirma los objetivos económicos del año. En el horizonte cuenta con dos transacciones: la venta de la división tecnológica y la potencial entrada de socios en su nueva filial para el negocio de espacio. Para la primera ha reclamado "tiempo" al mercado, mientras que para la segunda ya mantiene conversaciones con empresas europeas y estadounidenses con Hispasat como "opción".
En concreto, entre enero y marzo se registraron 1.118 millones de euros de ingresos, lo que supone un crecimiento del 22%. Si se excluyen los efectos del tipo de cambio y la contribución inorgánica de las adquisiciones ejecutadas en los últimos meses (que han sumado 35 millones de facturación con la compra de Park Air, Selex o GTA) la subida ha sido del 19%. Esto supone prácticamente cinco puntos porcentuales más que el último trimestre del año pasado y siete más que la media de todo el ejercicio 2023, según las cifras hechas públicas hoy por el grupo presidido por Marc Murtra y dirigido por José Vicente de los Mozos.
El resultado neto ha crecido un 40% desde los 44 a los 61 millones de euros. El flujo de caja se ha multiplicado por más de dos hasta los 68 millones. Esta mejora se explica, según la empresa, por la mayor rentabilidad operativa y por la mejora de la variación de capital circulante. La deuda neta se redujo tras el pico de finales de año hasta los 89 millones de euros. "Estos resultados conforman un gran punto de partida para conseguir los objetivos que nos hemos marcado", asegura el consejero delegado. Murtra los ha calificado como "sólidos" y ha destacado la creación de la división de Espacio durante este primer trimestre -esta generó unos ingresos de 13 millones, lo que supone un 7% de las ventas de la división de defensa-.
Defensa ha vuelto a tener un comportamiento muy positivo. Las ventas se dispararon un 56% hasta llegar a los 191 millones, impulsadas en su mayoría por la contribución del proyecto del caza europeo Fcas. Hay que tener en cuenta que este proyecto ha generado 56 millones de euros frente a un primer trimestre de 2023 en el que no generó nada. Excluyendo este efecto, la subida habría sido del 10%.
El tráfico aéreo, también vinculado con el área de defensa, ha elevado de manera notable las ventas hasta los 116 millones, lo que supone una mejora del 63%. Los contratos de Bélgica y España han sido claves, junto con las adquisiciones de la británica Park Air y del negocio de Selex que le permitió aterrizar en el mercado estadounidense. Si se excluyeran estas últimas -y el tipo de cambio- la subida habría sido del 42%.
En Minsait, cuya potencial venta parcial o mayoritaria se ha puesto sobre la mesa en el nuevo plan estratégico, la subida de las ventas fue del 12% impulsadas por el buen comportamiento de los verticales administraciones públicas y sanidad. Si se excluyeran las compras, entre las que están la consultora Nae o Deuser, la facturación orgánica habría crecido un 10%. El margen operativo fue del 7,2%, seis puntos porcentuales más. Pero el margen de Ebitda descendió ligeramente.
Objetivos y plan estratégico
Con estos números, la compañía -que sumó cerca de 1.000 empleados más a la plantilla hasta situarla en los 57.460- mantiene los objetivos financieros para todo el ejercicio: ingresos mayores a 4.650 millones; resultado bruto (Ebit) de más de 400 millones y un flujo de caja libre superior a los 250 millones. El dividendo para este ejercicio ya se aprobó el pasado mes de febrero. Es de 0,25 euros brutos por acción y se abonará el 11 de julio.
Esos objetivos ya se contemplaban en un plan estratégico aprobado el pasado mes de marzo. Entre las medidas que ya se han aprobado, según apunta la empresa en la presentación a los analistas, está la creación de un responsable de Transformación (Chief Transformation Officer) para liderar los cambios junto con diferentes medidas para priorizarlos. Ahora se han marcado como prioridades la culminación de la creación de la unidad de Espacio y un nuevo plan de incentivos para la cúpula ejecutiva basado en las previsiones planteadas en la hoja de ruta.
Espacio y Minsait, en el horizonte
Respecto a la unidad de espacio, el consejero delegado ha asegurado ante los analistas que Hispasat sigue siendo "una opción" dentro de otras potenciales incorporaciones a través de compras o de alianzas. "Queremos convertirnos en 'partners' europeos; es una opción, pero no la única. Depende de los próximos meses, de la discusión que tengamos con diferentes compañías en Europa y en algunos casos con estadounidenses", ha apostillado.
La otra gran transacción es la de Minsait. La empresa ya trabaja con algunos asesores financieros para la potencial entrada de un socio minoritario o mayoritario. En este sentido, el ejecutivo ha reclamado "tiempo" para llevarla a buen puerto. "Tenemos un plan y sabemos cómo hacerlo en los próximos meses", ha insistido, sin dar más pistas sobre si realmente se plantean la posibilidad de vender más del 50% de la firma de servicios de consultoría y tecnología.
