Nintendo incrementó su beneficio neto un 39% hasta 194.009 millones de yenes (1.555 millones de euros) en el ejercicio fiscal nipón de 2018, que finalizó en marzo, gracias a las sólidas ventas de títulos para su consola Switch y de unidades de la misma.
Durante dicho período, que abarcó desde abril de 2018 hasta el pasado marzo, el gigante nipón de los videojuegos logró un beneficio operativo de 294.701 millones de yenes (2.361 millones de euros), un 40,6% más, informó este jueves el fabricante de videojuegos en un comunicado.
En cuanto a las ventas, la empresa con sede en Kioto facturó un 13,7% más y se embolsó 1,2 billones de yenes (9.619 millones de euros) debido sobre todo al éxito de los juegos "Super Smash Bros.", "Super Mario Party" y a nuevas entregas de la serie Pokémon, que potenciaron también la venta de videoconsolas, según Nintendo.
La empresa vendió 13,81 millones de unidades de su último título de la saga "Super Smash Bros.", mientras que las novedades de su franquicia Pokémon colocó 10,63 millones de unidades. En total, comercializó 118,55 millones de títulos, un 86,7% interanual más, y 23 de sus videojuegos se convirtieron en "superventas" al rebasar el millón de unidades.
Gracias al buen funcionamiento de sus videojuegos en el mercado, las ventas de su consolas Switch también crecieron un 12,7% interanual hasta alcanzar los 16,95 millones de unidades en el año. Esta cifra, no obstante, está ligeramente por debajo del objetivo revisado de 17 millones que se había fijado la empresa y también de los 20 millones que estimó en sus previsiones iniciales. Desde su lanzamiento en marzo de 2017, se han vendido 34,74 millones de Nintendo Switch en todo el mundo.
La empresa también destacó el rendimiento de su plataforma de ventas digitales de software, que incrementó su facturación en un 95,4% hasta los 118.800 millones de yenes (952 millones de euros).
Nintendo también publicó hoy su previsión de resultados para el actual ejercicio, que concluirá a finales de marzo de 2020, y en el cual prevé embolsarse un beneficio neto de 180.000 millones de yenes (1.443 millones de euros) un 7,2 % interanual menos.
La empresa calcula que su beneficio operativo crecerá un 4,1 % hasta los 260.000 millones de yenes (2.084 millones de euros), mientras que sus ventas se incrementarían en el mismo porcentaje hasta los 1,25 billones de yenes (10.023 millones de euros).
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