La matriz principal de la red social Snapchat, Snap, despedirá al 10% de su plantilla a nivel mundial, unos 540 empleados. Se une de esta manera a otras grandes empresas tecnológicas que han anunciado nuevas rondas de despidos desde el comienzo de 2024. Solo durante este mes de enero más de 24.000 empleados del sector tecnológico han perdido su puesto de trabajo. Snap señaló que los despidos masivos podrían extenderse hasta el segundo trimestre del año mientras la compañía trabaja para cumplir con las leyes locales.
La compañía estima que los despidos supondrán unos costes en indemnizaciones y gastos relacionados de entre 55 y 75 millones de dólares antes de impuestos, que asumirá en su mayor parte en el primer trimestre de 2024. La A través de un documento remitido a la Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC, por sus siglas en inglés) la compañía ha señalado que "con el fin de posicionar mejor nuestro negocio para ejecutar nuestras principales prioridades y garantizar que tengamos la capacidad de invertir de manera incremental para respaldar nuestro crecimiento a lo largo del tiempo, hemos tomado la difícil decisión de reestructurar nuestro equipo".
Descenso de los ingresos por publicidad
La empresa ya recortó el 20% de su fuerza laboral, casi 1.300 empleados, en agosto de 2022, y despidió a 20 personas más en noviembre de 2023. Al igual que otras empresas de redes sociales, Snap ha estado trabajando para compensar la bajada de los ingresos por publicidad, haciendo frente a la caída a través de recortes de empleos y eliminación de proyectos que ya no se consideran prioritarios. Hace apenas cuatro meses, Snap anunció el cierre de una división centrada en la creación de servicios de realidad aumentada para empresas, poniendo fin a lo que fue su último intento de diversificar la compañía que depende de la publicidad. El cierre supuso la destrucción de 170 puestos de trabajo.
A falta del anuncio de resultados
Snap publicará sus resultados trimestrales el próximo martes después del cierre de los mercados. Hace tres meses, la empresa informó que regresó al crecimiento de ingresos tras dos períodos de caídas, pero advirtió que su progreso podría verse afectado por los retrasos de los anunciantes provocados por la invasión de Israel en Gaza y extensión del conflicto a otras zonas de Oriente Medio. El valor de la acción de la compañía cayó hasta un 2,4% a 16,64 dólares al inicio de las operaciones en Nueva York, siguiendo un retroceso más amplio del mercado de valores.
