El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles que el Ministerio de Defensa ha encargado a los astilleros de Navantia en Ferrol la construcción de un nuevo buque de aprovisionamiento de combate para la Armada que supondrá una inversión total de 439 millones de euros. Un anuncio que se produce en plena precampaña de las elecciones gallegas del próximo 18 de febrero, donde el PSOE aspira a formar coalición con el BNG relevando al PP al frente de la Xunta.
Sánchez ha destacado que la nueva embarcación supondrá una carga de trabajo de 3 millones de horas en los astilleros de Ferrol, así como la creación de 1.800 empleos entre puestos directos e indirectos. El presidente del Gobierno se ha reunido este miércoles en los astilleros de Ferrol con la dirección de Navantia, cita tras la que ha mantenido un encuentro con el comité de empresa.
Allí ha sido recibido por varios autoridades como el presidente de la empresa pública, Ricardo Rodríguez; el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco; el presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso; y el portavoz del PSOE local, Ángel Mato, entre otros.
"Renovar" la apuesta por la industria naval
Empezará "con la máxima celeridad" y contará con el trabajo de 300 empresas, de las cuales 175 serán gallegas. Lo ha explicado tras mantener un encuentro de trabajo con la dirección del astillero de Navantia en Ferrol y, posteriormente, se ha reunido con el comité de empresa para abordar cuestiones estratégicas de cara al futuro industrial del área. El presidente del Gobierno ha incidido en la necesidad de "reindustrializar Ferrol, Galicia y España" y hacerlo "en clave sostenible y en clave también digital porque esos son los pilares sobre los que se va a construir la competitividad de la economía".
En ese sentido, ha citado "no solo a la actividad de Navantia en el sector de la Defensa", sino también en campos como las renovables, en concreto "la eólica marina".El nuevo contrato supone, según Sánchez, "renovar" la apuesta del Gobierno por la industria naval española dentro de una estrategia global para "que España y Europa se reindustrialicen" con "impacto en el empleo y también en la cohesión territorial". En este sentido, ha citado también la construcción de las cinco fragatas F-110 de la Armada en estos mismos astilleros, con más de 20 millones de horas de trabajo, una inversión directa de 4.325 millones de euros y más de 9.000 empleos.
