Telefónica dispara ventas un 6,7% y reduce los beneficios un 57% por falta de 'extras'

Telefónica arranca el año 2023 con un fuerte crecimiento en los ingresos en todos sus mercados pero con una rentabilidad a la baja por la falta de operaciones extraordinarias. La operadora elevó durante los tres primeros meses un 6,7% las ventas, tras los ajustes de tarifas por inflación en las principales plazas, aunque el beneficio descendió un 57% frente al mismo periodo del año anterior, cuando se apuntaron plusvalías relevantes por la venta de la fibra en Colombia. La compañía mantiene las previsiones para el resto del ejercicio.

Las ventas se situaron en los 10.045 millones de euros. En caso de incluir el 50% del negocio de Reino Unido -que comparte con Virgin Media- rozarían los 11.500 millones-. El crecimiento ha sido del 6,7%. Vuelve a subir en todos los mercados, destacando el comportamiento de Brasil y Alemania. El caso español, con una mayor competencia especialmente en el mercado del 'bajo coste', la subida es de apenas el 0,3%.

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En el lado de la rentabilidad, la operadora se ha resentido por la ausencia de operaciones extraordinarias. El resultado bruto de explotación (Ebitda) se ha reducido un 2,4% hasta los 3.121 millones (con un margen que se deja 1,2 puntos porcentuales hasta el 32,1%). Pero el mayor impacto está en el beneficio neto, que se ha recortado un 57% hasta rozar los 300 millones de euros. La falta de otros ingresos extraordinarios es la clave. En el mismo periodo del año pasado, se apuntaron plusvalías relevantes por ventas de activos. Tanto en el lado del Ebitda, como en el de los ingresos se han batido las previsiones de los analistas.

Sobre el flujo de caja, la operadora la ha situado en 454 millones frente a los 513 millones de un año antes. Esta cifra se sitúa ligeramente por debajo del consenso. En cuanto a la deuda neta financiera, ésta se redujo ligeramente hasta los 26.443 millones de euros, por debajo de lo que esperaban los analistas. Este recorte ha venido motivado por el cobro de inversiones financieras y esa caja, que compensan el pago del dividendo, los compromisos laborales o el pago de cupones de instrumentos de capital.

Con estos mimbres, la operadora mantiene las previsiones para lo que queda de ejercicio, con crecimientos de 'un dígito bajo' tanto en ingresos como en Ebitda y un 14% de Capex frente a las ventas. Éste se ha situado en el 11,3% durante el primer trimestre del ejercicio. "Seguimos priorizando nuestras inversiones en oportunidades de crecimiento y estamos muy satisfechos de que hemos dejado atrás el pico en intensidad de capital", explica el presidente ejecutivo, José María Álvarez-Pallete, que insiste en las oportunidades que existen desde el punto de vista regulatorio, especialmente en Europa, y de iniciativas del sector, para explotar y monetizar más las redes.

Por mercados

Por mercados, España, que representa el 27% de todos los ingresos del grupo, sigue resintiéndose por la fuerte competencia. El volumen de negocio total se mantuvo estable, con una ligera subida del 0,3% (por segundo trimestre consecutivo) hasta los 3.088 millones de euros. Esto pese a que se subieron tarifas durante el mes de enero una media del 6,8% en los productos Movistar para hacer frente a la inflación. Los ingresos minoristas subieron un 1,7%, aunque las ventas de terminales se desplomaron un 14% y el negocio mayorista cayó por las menores ventas procedentes del fútbol (desde el pasado verano sólo tiene un 55% de los partidos de LaLiga tras la entrada de Dazn). Esto permite que el Ebitda caiga algo un 1,7%.

En verticales más allá de las operadoras de países, Telefónica Tech sigue acelerando en su crecimiento de ingresos. En total, éstos subieron un 43,5%, aunque si se tiene en cuenta un perímetro constante, estos subieron 27%. En el terreno de Infra, ha consolidado las compañías de fibra creadas en Europa y Latinoamérica. En el caso español, Bluevía -el consorcio con Vauban- ya supera el 80% de su objetivo de despliegue de 5 millones de unidades inmobilarias en 2024.