La compañía de lanzamiento de satélites Virgin Orbit, vinculada al grupo Virgin del británico Richard Branson, ha comenzado este martes el procedimiento voluntario para acogerse a la protección del Capítulo 11 del Código de Quiebras de Estados Unidos. El objetivo es proceder a la venta de este negocio y de sus activos maximizando al máximo su valor. La semana pasada Virgin Orbit anunció que prescindirá del 85% de la plantilla, unos 675 empleados, y el cese de sus actividades, tras no poder acceder a la financiación necesaria para continuar con su actividad.
El procedimiento se ha iniciado en el Tribunal de Quiebras de los Estados Unidos en el Distrito de Delaware por Virgin Orbit Holdings y sus filiales estadounidenses. Para la venta de Virgin Orbit cuenta con el apoyo de Virgin Investments Limited en forma de financiación por importe de 31,6 millones de dólares (29 millones de euros).
Tras obtener la luz verde del Tribunal de Quiebras se espera que esta financiación proporcione a Virgin Orbit la liquidez necesaria para continuar operando a medida que avanza en el proceso de marketing iniciado para vender la empresa y buscar una transacción que maximice el valor para el negocio y sus activos.
La compañía ha indicado que espera una conclusión rápida de su proceso de venta para brindar claridad sobre el futuro a sus clientes, proveedores y empleados, añadiendo que, mientras tanto, Virgin Orbit continuará operando bajo la jurisdicción del tribunal de quiebras y de conformidad con las disposiciones aplicables del Código de Quiebras de estados Unidos.
La compañía, fundada en 2017 y enfocada al desarrollo de cohetes para transportar pequeños satélites, no logró alcanzar beneficios como empresa cotizada y su posición se vio agravada cuando el pasado mes de enero fracasó en el intento de llevar a cabo el primer lanzamiento de un satélite al espacio desde Reino Unido.
Virgin Orbit ha comenzado ya adelgazar su estructura y anunció hace unos días una reducción de plantilla de unos 675 empleados, alrededor del 85% de la fuerza laboral de empresa, con el fin de reducir los gastos debido a la incapacidad "para asegurar una financiación significativa". En este sentido, la empresa ha informado de que los despidos afectarán a "todas las áreas de la compañía", que calcula que incurrirá en cargos por importe aproximado de unos 15 millones de dólares (13,8 millones de euros), incluyendo el pago de unos 8,8 millones de dólares (7,8 millones de euros) en indemnizaciones por despido y otras prestaciones, además de otros 6,5 millones de dólares (6 millones de euros) en otros costes.
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