El grupo sueco Volvo, dedicado a la fabricación de camiones, autobuses y maquinaria pesada, ha anunciado este viernes que ha adquirido el negocio de baterías eléctricas del fabricante estadounidense Proterra por 210 millones de dólares (196 millones de euros).
La compra se produce después de que la oferta efectuada por la empresa sueca fuese elegida en una subasta vinculada al proceso concursal al que Proterra está sometido en Estados Unidos, según recoge Efe.
Desarrollo de baterías eléctricas
Entre los activos adquiridos se incluyen un centro de desarrollo para módulos de baterías en California y una fábrica en Carolina del Sur. "Con esta compra, el grupo Volvo complementará la actual y acelerará su futura hoja de ruta para baterías eléctricas", señaló la firma sueca en un comunicado que recoge EFE.
La transacción, que se espera esté cerrada a principios de 2024, no tendrá ningún impacto material en el desempeño financiero del grupo. A su vez, dicha operación estará sujeta a la aprobación de los tribunales concursales estadounidenses.
