MADRID. GRANADOS DENUNCIA SU DETENCIÓN Y SITUACIÓN PENITENCIARIA Y REPROCHA AL PP SU ACTITUD HACIA ÉL

- Niega la existencia de espionaje. El ex consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid Francisco Granados, preso en la cárcel de Estremera por su supuesta implicación en el ‘caso Púnica’, negó hoy ante los miembros de la comisión que investiga el asunto de los ‘espías’ en la Asamblea de Madrid la existencia de espionaje.
Granados afirmó por videoconferencia desde Estremera que quería hablar de su detención y estancia en prisión para denunciar que se han violado sus derechos, pero la presidenta de la citada comisión parlamentaria, Dolores González, no se lo permitió porque dijo que el asunto a tratar era el caso de los ‘espías’.
Acuso a los diputados de “coartar” su libertad de expresión a la hora de hablar sobre la corrupción en la Comunidad de Madrid y señaló que “pasarán a la historia por eso”. Asimismo, explicó que fue detenido en 2014 cerca del colegio de su hija menor y llevado a unos calabozos de la Guardia Civil en Las Rozas, donde estuvo incomunicado cinco días, antes de ingresar en la prisión de Estremera. Aseguró que “no se respetaron" sus derechos y que no sabe de qué se le acusa, ya que el sumario sigue siendo secreto. Asimismo, añadió que “han lesionado gravemente mi derecho a la defensa y me siento maltratado y decepcionado”.
Tras declararse “inocente”, arremetió contra el PP, al que llamó “mi partido”, y apuntó que está en esta situación por ser del PP, “donde muchos no creen en la presunción de inocencia”, al tiempo que destacó que “si fuese del PSOE, mis compañeros me defenderían”.
Granados afirmó que desde su partido, “pensando que da votos, me han dado cera”, y habló del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, por decir que mandaría una inspección tras conocerse que el exministro de Industria José Manuel Soria aparecía en los ‘papeles de Panama’. Dijo que ese tipo de actitudes se deben a que “la política es miserable en algunos aspectos” y afirmó que “jamás he metido la mano en la caja”.
El exconsejero indicó que le "encantaría que me permitiesen venir pronto a declarar sobre la supuesta corrupción en la Comunidad de Madrid” y añadió sobre el asunto de los 'espias' que “no ha habido espionaje y algunos de los que han declarado –sobre este asunto- han cambiado su versión, por lo que han mentido antes o después".
Explicó que cuando se denunciaron los ‘espionajes’ se abrió una comisión de investigación interna en la Consejería de Presidencia y “desfilaron todos los involucrados” y relató que “todos declararon lo mismo, que todo era una falsedad”.
Manifestó que “nadie espió a nadie mientras estuve en la Comunidad” y añadió que todos los nombramientos en el departamento de Seguridad se realizaban con el consentimiento de la expresidenta Esperanza Aguirre, aunque fuesen formalmente hechos por él.
Antes de la comparecencia de Granados, habló Yolanda Laviana, exsecretaria de Aguirre, quien dijo que “este asunto ha destrozado" su vida pero tiene "la conciencia tranquila", aunque aseguró que tiene miedo.
También comparecieron el policía nacional José Manuel Rodríguez, exasesor de Seguridad de la Comunidad de Madrid, y el exconsejero de Presidencia Alfredo Prada, que manifestó que en su etapa no se hicieron informes sobre nadie “ni hubo seguimientos a personas ni espionajes”.