El PSdeG apoya con reticencias la tramitación de una propuesta de ley del BNG para crear una hacienda gallega

La anunciada negativa del grupo mayoritario de la Cámara gallega a la propuesta del BNG de tramitar una propuesta legislativa para pedir, para Galicia, un concierto económico, se tradujo en la sesión plenaria de este martes en los votos en contra a la iniciativa de los nacionalistas, que han recriminado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y a su partido, de decir que "no" a cada propuesta que ha hecho el Bloque en esta materia.

Sin embargo, y aunque no condicionó el resultado final, el PSdeG, dirigido por una gestora y que acaba de cambiar la dirección del Grupo Parlamentario tras la elección de Xoaquín Fernández Leiceaga como candidato a la Xunta apoyó, no sin reticencias en el mensaje enviado, la propuesta del Bloque. Entre otras cuestiones, la iniciativa pide crear una hacienda propia para Galicia y que esta comunidad tenga un sistema de financiación a imitar del navarro o vasco.

En su intervención en el debate, el representante popular en el debate, Pedro Puy, ha criticado que el BNG basa su petición en las "cuentas de la vieja", al comparar lo que ingresa el Estado de impuestos de Galicia con lo que se gasta en las transferencias, pero "olvidando" las otras inversiones, como infraestructuras, que se realizan. Además, ha asegurado que el sistema que piden los nacionalistas no sería beneficioso para Galicia.

El diputado socialista ha apostado por hacer un "análisis serio" sobre la cuestión de la financiación autonómica y, por ello, el grupo adoptó una postura "a favor" de la toma en consideración, pero con "todas las dudas". "Se ve que el PSOE están de aventuras. Bienvenido a la aventura", ha ironizado el diputado popular al respecto de la postura expresada por los socialistas.

Entre otras cuestiones, el parlamentario socialista ha puesto de manifiesto que "Galicia necesita más recursos del Estado", pero, como dudas, ha planteado las constitucionales y el propio marco estatutario como ámbito en el que no encajaría la propuesta del BNG.

DEFENSA DEL BNG

En la defensa de la iniciativa, el portavoz del Grupo del BNG, Francisco Jorquera, ha sido el encargado de defender esta propuesta en los últimos compases de la legislatura, lo que le ha llevado a decir que es hora de "hacer balance" de estos cuatro años de gobierno, la segunda legislatura de Feijóo.

Primero, recordó, el BNG pidió una comisión de estudio para abordar un nuevo modelo de financiación autonómica y la respuesta fue un "no"; luego se pidió que se presentasen un proyecto de financiación y propuestas para dialogar con los grupos de la oposición, y la actuación ha sido un "no"; y ahora los nacionalistas "concretan" su propuesta, y "vuelven a decir que no".

Jorquera ha proclamado que Galicia "tiene derecho y necesita" una hacienda propia y recaudar sus propios impuestos, como "nacionalidad histórica" reconocida y "nación" que es, bajo su concepción. Así pues, ha incidido en que "Galicia no es deficitaria", sino que aporta "más" al Estado de lo que recibe para cubrir las competencias transferidas y ha puesto el ejemplo de las empresas como Inditex, Citroën o Fenosa, que "tributan en Madrid el impuesto de sucesiones".

El diputado nacionalista, que inició su discurso con un recuerdo a Alexandre Bóveda (fusilado por el franquismo) ha subrayado que Galicia no puede seguir "lamentándose" de que a Euskadi y Navarra le vaya bien y sean las que tienen "los mejores indicadores económicos".

Antón Sánchez y Chelo Martínez, por parte de AGE y de Grupo Mixto respectivamente, también expresaron su coincidencia con los argumentos del diputado del BNG. "Una cuestión trascendente", dijo el parlamentario de Alternativa, mientras que la compañera en la oposición concordó en que "no se puede tener autonomía" si no se cuenta con soberanía financiera. "Voten a favor de la soberanía gallega y del concierto económico", ha enfatizado.

El portavoz popular ha recriminado las "cuentas de la vieja" sobre las que, a su entender, el BNG sustenta el debate y ha apuntado que, con el pacto económico que pedían los catalanes, y que los nacionalistas gallegos "apoyaban", se le "quitaría a Galicia entre 500 y 780 millones de euros"; mientras que la "independencia", que también respalda el Bloque --dijo--, le supondría entre 800 y mil millones.