Alfredo Prada renuncia a su escaño en la Asamblea por "ética personal"

Madrid.- El director del Departamento del PP en el Exterior, Alfredo Prada, ha decidido renunciar a su escaño en la Asamblea de Madrid por motivos de "ética personal", ya que el aumento de su carga de trabajo fuera de España le impide cumplir con sus deberes como diputado, según ha avanzado a Efe.

El que fuera vicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior en el primer Gobierno de Esperanza Aguirre (2003-2007) formalizará la semana que viene su dimisión y en su lugar entrará como diputado en el Parlamento madrileño David Erguido, en la actualidad asesor técnico del Gabinete de la Presidencia.

Prada ha explicado que ya comunicó esta decisión a Aguirre hace unos días y que a la presidenta le pareció "correcta".

Alfredo Prada fue una de las principales víctimas, junto al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, del presunto espionaje político de 2008.

Prada fue supuestamente espiado en abril y mayo de ese año, cuando aún era vicepresidente y consejero del Gobierno de Aguirre pero se había distanciado políticamente de ella, en favor del liderazgo de Mariano Rajoy de cara al Congreso Nacional del PP.

Su dimisión se produce tres meses después del archivo judicial del caso, que Prada -a diferencia de Cobo- no llegó a recurrir.

A día de hoy, sus relaciones con Esperanza Aguirre son "normales y cordiales incluso", asegura.

Además de director del Departamento del PP en el Exterior, Prada es miembro del Comité Ejecutivo Nacional.

Según ha explicado, ambos cargos le hacen estar "muy liado", máxime cuando se aproximan las elecciones catalanas y tiene que organizar 52 actos de partido en los 95 países en los que ha creado una estructura orgánica durante los últimos dos años.

A esto ha sumado la labor que tiene por delante para celebrar diversos encuentros con la emigración española a finales de este año y principios del que viene, así como los diversos "congresos por el mundo" que tiene que organizar, los más inmediatos en Estados Unidos y Alemania, que se sumarán a los ocho que ya ha llevado a cabo.

"Todo eso y mi deseo de no volver a ir en las listas autonómicas (en las elecciones de 2010) me ha llevado a pensar que por ética personal debo dejar el acta y que la ocupe otra persona", ha argumentado.