(ampliación) 20-n. Rubalcaba pide el voto para asegurar la paz y extrapolar a españa el modelo de crecimiento de euskadi

El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno y ex ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidió este miércoles el voto de los vascos para seguir consolidando la paz en Euskadi, entre otras cosas como “condición necesaria” para crecer económicamente y poder extrapolar al resto de España un modelo de crecimiento que se ha demostrado eficaz.
Rubalcaba protagonizó un pequeño acto electoral en un hotel en Vitoria junto al lehendakari, Patxi López, y al ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, que se refirió expresamente a él como la mejor opción para seguir consolidando la paz en el País Vasco.
Después, el propio candidato pidió el voto para asegurar la paz, “como decía Ramón”, pero sobre todo porque está convencido de que eso es “condición necesaria” para garantizar el crecimiento económico y la creación de empleo.
Con paz “se crece mejor”, aseguró, se reparte mejor la riqueza, y por eso se declaró “pedigüeño”, antes pidiendo respaldo para defender la paz y la libertad frente a los terroristas y su entorno, y ahora para seguir consolidándola y para coger el modelo económico de Euskadi como “modelo” para el resto de España.
Sus primeras palabras fueron para agradecer el apoyo de los socialistas vascos y muy especialmente de “Nati”, Natividad Rodríguez, la vuida de Fernando Buesa, asesinado por ETA, que a veces ha tenido “un papel muy difícil” como víctima de la banda. “Gracias por tu apoyo”, le dijo.
A medida que va pasando el tiempo desde que ETA anunció el cese de su actividad armada va sientiendo “la misma alegría” que en ese momento “pero como más asentada, más reposada”, “menos emocionado pero más contento”.
“No dejo de miraros y de pensar lo mismo. Ya está, y ahora nos vamos a tomar un vino”, dijo a los socialistas vascos, pese a reiterar la necesidad de “no descuidarnos” y de seguir preservando la unidad de los demócratas “por la que tanto hemos peleado, por la que tanto hemos tragado”.
Con esa idea, el candidato socialista reafirmó su compromiso con la unidad de los demócratas para afianza el final de ETA, pero dejando claro al mismo tiempo que no olvida la utilización que en ocasiones ha hecho el PP de la lucha antiterrorista.
Reafirmó también el recuerdo permanente de las víctimas, porque “nosotros iremos viviendo esta libertad con absoluta y plena normalidad”, pero quienes padecieron en primera persona el terrorismo seguirán sufriendo y pensando “por qué me tocó a mí”.
Rubalcaba expuso los ejes de su proyecto para salir de la crisis preservando la solidaridad y la cohesión social, pero con el aditivo de “importar” para el resto de España el modelo de crecimiento del País Vasco, “que está funcionando” y, de hecho, resistiendo la crisis mejor que el de las demás comunidades autónomas.
Los mismos empresarios vascos que recientemente le agradecían su compromiso contra ETA, explicó, le decían también que la clave del tejido empresarial en ese territorio es la formación de los trabajadores, la inversión en innovación, y la madurez de las relaciones laborales.
Se declaró por ello “pedigüeño” y, lo mismo que “hasta hoy” pedía el respaldo para defender la paz y la libertad frente a las bombas, lo pidió para seguir defendiendo la consolidación de esa paz pero para dar también un paso más, tomar el modelo de crecimiento en Euskadi como ejemplo para España.
El candidato socialista volvió al debate del pasado lunes frente a Mariano Rajoy para seguir denunciando sus silencios en asuntos delicados que los electores deberían tener claros para poder elegir el modelo que determinará el futuro de España en los próximos años.
Recordando la canción “Sonidos del silencio” de Simon & Garfunkel, Rubalcaba aseguró que hay silencios “estruendosos” y algunos además “muy inquietantes”, y son especialmente reprochables en momentos que los ciudadanos perciben como encrucijadas y ante los que los líderes políticos deben definirse.
Por ello, insistió, el trabajo de los socialistas en esta campaña es “doble”, explicar a los ciudadanos su propio proyecto para salir de la crisis y también lo que Rajoy calla sobre el suyo.
Aunque ahora quiera dar un perfil distinto, aseguró, la realidad de su programa son los recortes que ya hace el PP en las comunidades autónomas donde gobierna, y que el líder de la oposición sólo ha trabajado con intensidad "una noche", la anterior a la aprobación del plan de ajuste en mayo de 2010, buscando la caída del Gobierno aunque lo fuera también de España.