Aznar dice ahora que su agenda está completa y que no podrá hacer campaña

  • Después de que José María Aznar lamentara ayer que nadie le había invitado a participar en la campaña del PP y de que su partido se apresurara a ofrecerle su asistencia a varios mítines, la Fundación Faes -que preside Aznar- ha aclarado que su agenda ya está completa y que no hay tiempo para cambiarla.

Madrid, 29 abr.- Después de que José María Aznar lamentara ayer que nadie le había invitado a participar en la campaña del PP y de que su partido se apresurara a ofrecerle su asistencia a varios mítines, la Fundación Faes -que preside Aznar- ha aclarado que su agenda ya está completa y que no hay tiempo para cambiarla.

Fuentes de la fundación han negado que Aznar se haya quejado por esta omisión, aunque han reconocido que no fue hasta ayer cuando el director de campaña del PP, Carlos Floriano, llamó al secretario general de la fundación, Javier Zarzalejos, para interesarse por el asunto.

De hecho, esta misma mañana el candidato del PP, Miguel Arias Cañete, se mostraba convencido de que Aznar encontraría "un hueco" en su agenda para participar con él en algún mitin de campaña. "Lo vamos a pasar muy bien", adelantaba Cañete.

Sin embargo, una vez que Aznar ha confirmado su ausencia de la campaña por problemas de agenda, el PP ha preferido no seguir avivando la polémica.

El propio Carlos Floriano ha querido dejar claro que Aznar ha sido y siempre será un gran activo para el partido.

Una idea reiterada por el portavoz de Economía del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, que ha defendido que Aznar es un "activo" para la sociedad frente al "pasivo" que supone el socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

Para Pujalte, los mítines son "lo de menos" porque Aznar "participa en la campaña simplemente porque su recuerdo es un activo".

También ha restado importancia a la ausencia de Aznar el portavoz adjunto del PP en la Cámara baja, Rafael Hernando.

"Él sabrá si tiene otros problemas de agenda. No tengo nada más que decir, cada uno establece sus agendas y establece sus prioridades", ha asegurado en los pasillos del Congreso.

Hernando ha insistido en que el PP sigue "con los brazos abiertos" para que Aznar pueda participar en actos de campaña -"sería estupendo -ha dicho-", pero comprende que la agenda internacional del expresidente es "enormemente" complicada y encajar los diferentes compromisos "a veces no es sencillo".

Tampoco ha querido echar más leña al fuego sobre un supuesto enfado de Aznar el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo.

"Eso pregúntenselo ustedes a él", ha contestado Margallo a los periodistas, a los que ha comentado que en campaña electoral barre "la esquina" que le toca barrer y hace lo que le dice Génova y no opina ni se ocupa de lo demás.

El que sí ha terciado en la polémica ha sido Alejo Vidal-Quadras, presidente de Vox y antiguo compañero de partido de Aznar, que ha invitado al expresidente a participar en los actos de campaña de su formación política.

"Sería una lástima que en las semanas que faltan hasta la apertura de los colegios no se pudiese oír tu autorizada voz", asegura Vidal-Quadras en una carta enviada a Aznar.

Desde el PSOE, Manuel Chaves ha criticado al PP por "renegar" de Aznar y ha avisado de que muchos electores de ese partido deben estar "muy escandalizados".

El expresidente de la Junta de Andalucía y del PSOE ha juzgado que "lo peor" que puede hacer un partido que se dice democrático es renunciar a sus líderes y dirigentes en campaña, y sobre todo a una persona que ha sido presidente del Gobierno.

"Renegar" de esas personas y de ese pasado "es bastante lamentable y muchos electores estarán preocupados y muy escandalizados con esa decisión", ha apostillado.

También ha hablado del asunto la líder de UPyD, Rosa Díez, que ha echado mano del lenguaje de su hija, tal y como ella ha dicho, para sentenciar: "Me la repampinfla".

Para Díez, las historias internas del PP y los problemas que tengan para quién da el mitin "es lo de menos" porque, a su juicio, lo que importan son los programas y la confrontación de ideas.

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