Barcelona, 27 jun.- Convivencia Cívica Catalana ha anunciado hoy que se querellará contra Artur Mas e Irene Rigau por un delito de desobediencia a los tribunales si el presidente de la Generalitat y la consellera de Enseñanza incumplen la última sentencia del Tribunal Supremo (TS) sobre el catalán en la escuela.
Esta organización, que ha auspiciado varios de los recursos judiciales presentados por familias que reclaman la enseñanza en castellano para sus hijos, considera hoy que el "sometimiento del poder político a las decisiones de jueces y tribunales y a sus resoluciones judiciales es un principio elemental, indispensable de la democracia".
La sentencia del Supremo impone también el castellano como lengua vehicular en el segundo ciclo de educación infantil en Cataluña.
El argumento del gobierno catalán, según el cual la Ley de Educación de Cataluña (LEC) "blinda" frente a la última sentencia del TS, "carecen de todo fundamento jurídico", según Convivencia Cívica.
A juicio de esta organización, el poder político "no puede en ningún caso" interpretar la LEC ni ninguna otra ley, "una función que está reservada a jueces y tribunales sobre la base del principio democrático de la división de poderes".
Convivencia Cívica considera que el ejecutivo catalán "debe abandonar su actitud antidemocrática y acatar las sentencias de los tribunales y modificar el actual régimen lingüístico escolar, esto es, el sistema de inmersión, sustituyéndolo por un modelo de conjunción lingüística".
Advierte, además, que exigirá la "ejecución efectiva" de la sentencia, conocida ayer, del Tribunal Supremo y a ejercer las acciones legales que considere oportunas, incluyendo querellas contra Mas y Rigau, "con el fin de restaurar las condiciones democráticas en Cataluña".
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