Las normas para la contratación de los jóvenes cambian. El Congreso de los Diputados ha convalidado con 166 votos a favor, 157 abstenciones y 15 en contra el decreto ley de medidas laborales que pone fin a que un empresario pueda encadenar contratos temporales sólo durante dos años.
Ahora desaparece este límite, de forma que el empresario podrá contratar temporalmente a un trabajador durante el tiempo que desee.En la actualidad, pasados esos dos años, el empresario debe hacer indefinido al trabajador o no renovarle.
Pero el Gobierno considera que para reducir los altos niveles de desempleo en nuestro país es necesario dar más flexibilidad a la contratación. "Hoy en día el empresario antes de renovar si esa renovación implica la conversión automática en indefinido, no contrata. Es una práctica bien aquilatada y legal" ha explicado el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, para defender esta iniciativa.
Además, el decreto ley aprobado amplía hasta los 30 años el límite de edad para poder a hacer un joven un contrato de formación y amplía durante seis meses más la ayuda de 400 euros a parados de larga duración.
Abstenciones y votos en contra
El Gobierno ha sacado adelante este decreto gracias, principalmente a la abstención del Partido Popular, que hasta hoy se ha opuesto radicalmente a toda reforma laboral del Ejecutivo y a otras iniciativas económicas.
CiU se ha abstenido y el PNV se ha unido a Coalición Canaria y al resto de formaciones de izquierda (ERC, IU, ICV, BNG) que han tachado la última reforma laboral del Gobierno de "barra libre" para la contratación temporal, en palabras de Joan Ridao, portavoz de Esquerra en el Congreso.
"Este decreto va a provocar los efectos contrarios a los deseados, va a precarizar aún más la contratación de los jóvenes", ha enfatizado Emilio Olabarría, del PNV.
El segundo acuerdo del PP y PSOE en menos de un mes
El PP ha accedido a abstenerse en este caso, según ha explicado, para frenar el acuerdo del Gobierno con los nacionalistas de CiU y PNV para introducir una enmienda en este decreto que daba prevalencia a los convenios autonómicos sobre los estatales.
Este pacto ha puesto el grito en el cielo de los nacionalistas, que tachan que el PSOE se arrime ahora al PP para "limitar la capacidad de las autonomías y de su autogobierno" en palabras de Carles Campuzano, de CiU, para quien ante la "posible mayoría absoluta del PP es un preludio del escenario que habrá la próxima legislatura".
Lo cierto es que en el último mes, PSOE y PP han llegado a importantes pactos que contrastan con el enfrentamiento que han protagonizado durante toda la legislatura salvo en casos excepcionales que afectaban a sus intereses o a su cuota de poder.
El mundo al revés
Lo cierto es que en la votación de este decreto, al igual que la reforma de la Constitución, se ha visto al Gobierno enfrentado a sus tradicionales socios –PNV y CiU- con los que ha sacado adelante la mayoría de sus reformas y unido al Partido Popular, con quien apenas se ha entendido.
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