Naciones Unidas.- Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU tratan hoy de resolver a través de negociaciones informales las diferencias que les separan en relación a la ampliación por un año del mandato de la misión del organismo en el Sahara (Minurso).
Fuentes diplomáticas dijeron hoy a Efe que el objetivo de esos contactos, que se prolongarán durante el día, es encontrar una fórmula de consenso para someter a votación un proyecto de resolución consensuado.
De consensuarse hoy esa fórmula, la resolución sería votada por los quince miembros del Consejo probablemente mañana viernes, ya que ese día vence el actual mandato de los "cascos azules" desplegados en la ex colonia española.
La falta de acuerdo ha obligado a posponer la reunión que tenía programada hoy el Consejo de Seguridad para autorizar la continuidad de la presencia de Naciones Unidas en el Sahara, donde llegó en 1991 tras el alto el fuego declarado por Marruecos y el Frente Polisario.
Las diferencias que separan a los quince miembros del Consejo se centran en la exigencia del Polisario de que se incluya en la nueva resolución algún mecanismo de supervisión de la situación de los derechos humanos en el territorio ocupado por Marruecos en 1975, a lo que Rabat se opone tajantemente.
El Grupo de Amigos del Sahara Occidental (Francia, EEUU, España, Reino Unido y Rusia) ha puesto sobre la mesa del Consejo un proyecto de resolución en el que no se incluye la petición del Polisario, por considerar que sería contraproducente para los intentos de encontrar una solución negociada al conflicto.
Por otro lado, varios miembros no permanentes del máximo órgano son favorables a la propuesta de México de que la resolución inste a las partes a mantenerse en contacto con la oficina de la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, tanto para abordar la situación en el territorio, como en los campos de refugiados de Tinduf (Argelia).
El texto alternativo mexicano es visto por los países cercanos a la postura del Polisario como un compromiso aceptable, pese a que no contempla incorporar la supervisión de los derechos humanos directamente al mandato de la Minurso, que era el deseo de los independentistas saharauis, según aseguraron a Efe fuentes diplomáticas.
En ese sentido, el Frente Polisario culpó el miércoles a Francia en un comunicado de impedir un mayor escrutinio de la situación en el Sahara Occidental, por su deseo de evitar que se conozcan las supuesta violaciones de derechos humanos cometidas por las autoridades marroquíes.
Asimismo, acusó a París de contradecir con esta postura "su autoproclamado estatus de fundador del movimiento moderno de los derechos humanos".
Para Marruecos, la insistencia del Polisario en este asunto es una maniobra para obstaculizar las negociaciones sobre la soberanía de la ex colonia española auspiciadas por Naciones Unidas.
Marruecos y el Polisario han celebrado desde 2007 cuatro reuniones directas en la localidad de Manhasset, en las afueras de Nueva York, sin que hayan logrado acercar posturas.
Posteriormente celebraron dos reuniones informales, en Viena y Nueva York, sin que tampoco se lograran avances.
El reino alauí sostiene que la única solución realista al conflicto es su propuesta de conceder la autonomía al territorio que ocupa militarmente desde hace 35 años.
Por su parte, el Polisario insiste en la celebración de un referéndum que incluya la independencia entre las opciones.
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