El Gobierno pide a Mas que se ajuste a legalidad en su salida

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido hoy al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que tras el "fracaso" del proceso de autodeterminación su salida sea "con arreglo a la legalidad", y ha recordado que, de lo contrario, el Gobierno utilizará los procedimientos adecuados.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta ha dicho que no sabe cuál es la decisión que va a adoptar Mas y, tras recordar que "en otras ocasiones ha convocado elecciones", ha dicho que espera que la salida que tome se ajuste a la legalidad porque el Gobierno siempre garantizará "el cumplimiento de la ley".

Sáenz de Santamaría, que ha insistido en que el Ejecutivo mantiene "las líneas de diálogo abiertas" con la Generalitat, ha recalcado que "Mas es quien tiene que tomar las decisiones sobre su futuro político, su partido y su Gobierno".

Ha puntualizado que ha quedado acreditada "la fortaleza de la democracia que tiene su expresión en el Estado de Derecho" y ha recordado que el referéndum de autodeterminación planeado por Mas "no se va, ni se puede llevar a cabo".

"Ese respeto de la legalidad es lo que da fortaleza a nuestra democracia y pone además en evidencia que cuando uno se sale de la senda del respeto a la legalidad acaba por tener que reconocer que no puede seguir en ese camino", ha añadido.

La vicepresidenta ha insistido en que el Gobierno no sabe qué quiere hacer ahora Mas, pero en cualquier caso mantendrá los cauces seguidos hasta ahora con "firmeza dentro de la serenidad que da tener de la parte de uno el Estado de Derecho y la democracia".

En su opinión, Mas tendrá que explicar "con quién va y a dónde va" y el Gobierno siempre valorará todo "lo que sea en la dirección del sentido común", "de la legalidad, el fortalecimiento de la democracia" y pensando en los intereses de Cataluña, así como de cualquier comunidad autónoma.

Como Gobierno, ha dicho la vicepresidenta, lo que prima es "ley y diálogo", y en este sentido ha asegurado que tienen "abierto el diálogo con distintos líderes políticos en Cataluña" porque les "importa" esa autonomía, que les gustaría que "volviera a entrar en la senda de la legalidad y de la serenidad democrática".

"Vamos a tener siempre abierto el diálogo con quien haga falta", ha subrayado.Cuestiona las prioridades del PSOE

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría también ha acusado hoy al PSOE de cambiar de un día para otro su preocupación por la salud y ha cuestionado que para el principal partido de la oposición este tema sea lo primero.

"Si un miércoles uno se levanta en la tribuna del Congreso y dice que no va a hacer crítica porque la salud es lo primero y al día siguiente hace crítica, es que la salud ha dejado de ser lo primero" pero "desde luego, para el Gobierno, no", ha aseverado.

Así se ha pronunciado la vicepresidenta en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en respuesta a los periodistas que le han pedido su opinión sobre que el PSOE haya elevado el nivel de sus críticas y haya pedido oficialmente la reprobación de la titular de Sanidad.

La vicepresidenta ha dicho que no le corresponde a ella"diseñar la estrategia de la oposición".

La vicepresidenta ha defendido la labor de Ana Mato al frente de Sanidad, ha resaltado que "todos" los miembros del Gobierno están "para trabajar", y no sólo para resolver los problemas de contagio, sino para organizar la coordinación con el resto de los países.

Además, ha destacado el informe sobre el ébola presentado por Mato en el Consejo de Ministros, así como su trabajo en la coordinación con el resto de los países.

Sáenz de Santamaría también ha elogiado el trabajo del personal sanitario y, en concreto hoy, el de los técnicos del laboratorio que están "realizando muy bien su trabajo" en la práctica de las pruebas sobre el ébola.

Respecto a la investigación acerca de cómo se produjo el contagio de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, ha dicho que no es algo que corresponda al Comité Especial ni al científico, sino a sus cauces administrativos y que la voluntad es que se llegue hasta el final.