El gurú de rajoy vaticina un empate entre psoe y pp en las elecciones municipales

El sociólogo Pedro Arriola, asesor personal de Mariano Rajoy y gurú de cabecera del PP, ha advertido a la dirección nacional y los responsables territoriales del partido de que la crisis económica tendrá una escasa influencia en las elecciones municipales de 2011, por lo que no deben pensar que lo tendrán más fácil por el desgaste político de Zapatero ni la caída en las encuestas del PSOE.
Según informaron a Servimedia fuentes populares, Arriola envió este mensaje en clave interna durante su intervención en el encuentro de presidentes provinciales que el PP ha celebrado esta semana en Segovia con el fin de preparar la campaña para los comicios autonómicos y locales del próximo mes de mayo.
Arriola expuso a puerta cerrada que las encuestas que maneja el partido le sitúan con una ventaja de hasta 18 puntos por encima del PSOE en intención de voto, si ahora se celebrasen elecciones generales. Sin embargo, esa distancia sería mínima en el caso de los comicios municipales del año que viene. Incluso, podría darse un empate técnico.
El motivo, según adujo el sociólogo, es que el descrédito y el desgaste que acumula el PSOE a nivel nacional por la gestión económica del Gobierno de Zapatero no se traslada al ámbito local. Sólamente tendría una pequeña influencia en las grandes ciudades, mientras que la repercusión en las pequeñas urbes sería "mínima" e incluso "nula" en los pueblos con baja población.
Arriola aconsejó, por esta razón, que el PP cuide más que nunca la elección de los candidatos. La persona que encabece la lista será "clave" para ganar o perder en miles de pequeños municipios, mientras que en las grandes ciudades vaticina que el PSOE sufrirá de por sí un ligero desgaste por la crisis económica.
De hecho, el asesor personal de Rajoy cree que no conviene incidir en exceso en el "discurso del cambio" en la campaña de las autonómicas y locales porque puede volverse en contra en aquellas regiones y ciudades donde el PP lleva muchos años gobernando.
EL PELIGRO DE ALENTAR EL CAMBIO
Llamar a los votantes a que apuesten por el cambio político en 2011 podría beneficiar al PSOE en su lucha por restar apoyos a alcaldes y presidentes autonómicos populares que llevan varias legislaturas en el cargo, como la valenciana Rita Barberá, la gaditana Teófila Martínez, el murciano Ramón Luis Valcárcel o el riojano Pedro Sanz.
Arriola entiende que las elecciones municipales depararán un resultado parejo entre PSOE y PP en cuanto a número de votos, aunque la noche de las urnas ofrezca un mapa de España con la mayoría de las capitales de provincia pintadas de azul, el color corporativo de la formación que lidera Mariano Rajoy.
Cosa distinta ocurriría en caso de convocarse ahora las elecciones generales. Según Arriola, el PP obtendría una gran victoria, aunque con una superioridad menor a la que auguran todos los sondeos. En lugar de los 12 o 14 puntos de ventaja que pronostican las encuestas publicadas por los medios de comunicación, Rajoy podría vencer por más de seis y rozar la mayoría absoluta.
El sociólogo de cabecera de los populares cree que el triunfo está prácticamente asegurado para 2012 por el "descrédito" que acumula Zapatero. Ni siquiera contempla demasiadas opciones a los socialistas aún en el caso de que el presidente del Gobierno renunciara a la reeleción y dejase paso a otro candidato, aunque fuese Rubalcaba.
Por eso, el principal consejo de Arriola al PP en clave nacional es "no cometer errores" hasta las próximas elecciones generales para que el PSOE no encuentre oportunidad alguna de invertir la situación.
DE "INSERVIBLE" A "ENTELEQUIA"
La intervención del sociólogo ha dejado más satisfechos a los presidentes provinciales del PP esta vez que la última ocasión en la que Arriola acudió a una cita de este tipo. No obstante, algunos dirigentes presentes en el encuentro calificaron de "entelequia" las tesis del experto.
Peor valoración recibió el pasado mes de mayo cuando Arriola acudió a una reunión similar en Zaragoza. Entonces, los presentes tacharon de "aburrida" e "inservible" la exposición porque el sociólogo presentó un resumen de las encuestas que se habían publicado en los meses anteriores y compararlas con las previas a la victoria del PP en 1996.
Arriola se limitó a exponer que la valoración política del Gobierno estaba ya entonces por los suelos como consecuencia de la crisis económica y que el atractivo personal que hace años tenía el socialista José Luis Rodríguez Zapatero prácticamente había desaparecido.
El sociólogo subrayó que el PP ganaría las elecciones generales si se celebrasen en esos momentos, lo cual no sorprendió a ninguno de los asistentes a la cumbre de Zaragoza porque así lo ponían de manifiesto todas las encuestas publicadas desde principios de año.
Arriola fue más cauto respecto a los comicios municipales y autonómicos que tendrán lugar en mayo de 2011. Advirtió de que, a pesar de la situación económica, no había nada ganado y debía ser cada candidato quien se ganase con trabajo y esfuerzo la confianza de los ciudadanos.
En particular, recomendó que los alcaldes del PP se volcasen en los próximos meses en tener en orden sus municipios porque la reválida de sus cargos puede depender de "una farola" o de "un cubo de basura".