El PSOE pide que se obligue a la banca a limitar el reparto de dividendos

Madrid, 12 dic.- El portavoz socialista de Economía en el Congreso, Valeriano Gómez, ha defendido hoy que sea "obligatoria" la recomendación del Banco de España de que el reparto de dividendos de los bancos no supere el 25 % de sus resultados, y no sólo durante un año, sino "por el tiempo que sea necesario".

Así se ha expresado Gómez durante su intervención en el pleno del Congreso, que ha convalidado hoy el real decreto ley de medidas urgentes en materia de supervisión y solvencia de las entidades bancarias, que les permite contabilizar como capital principal el 60 % de sus créditos fiscales (DTA por sus siglas en inglés).

Gómez ha señalado que, si el Estado "hace un esfuerzo" para garantizar que los activos fiscales diferidos estén disponibles en cualquier circunstancia, "incluso en caso de insolvencia", lo "justo" es que los propietarios compartan esa carga.

Es por ello que el socialista aboga por obligar a las entidades bancarias a limitar su retribución en efectivo al reparto de dividendos a los accionistas a un máximo del 25 % de sus resultados.

Además, el exministro de Trabajo también ha cuestionado que el Estado tenga que garantizar los activos fiscales deducidos de las aportaciones a planes y fondos privados de pensiones.

A la posición del PSOE se refirió durante el debate del decreto ley el portavoz de Economía del Grupo Popular en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, que denunció que "a veces los del PSOE afirman cosas cuyos responsables han sido ellos cuando gobernaban".

Durante su intervención, Pujalte aseguró que la voluntad de su formación "es llegar al máximo consenso posible con el resto de grupos de la Cámara en un tema de gran interés".

En ese sentido, destacó que garantizan, "en la línea de Europa, un Gobierno corporativo adecuado de las instituciones financieras", y están dispuestos a negociarlo.

Por su parte, el diputado de CiU Josep Sánchez i Llibre ha insistido en que, aunque su grupo haya apoyado el decreto ley, hay que seguir trabajando para que el crédito fluya hacia las familias y las pymes, algo que "reclaman desde hace seis años".

Un asunto que también ha mencionado el diputado de La Izquierda Plural Alberto Garzón, que considera que la nueva norma supone "otra ayuda más al sistema financiero", que no se hace con las familias o las pymes, y ha asegurado que "se están sentando las bases de una nueva crisis financiera".

El diputado de UPyD Álvaro Anchuelo también ha opinado que la nueva ley amplía el rescate a la banca, de forma "avergonzante, envuelto en tecnicismos y de espaldas a la opinión pública", y ha recordado que hay entidades "que tienen el 70 % de su capital" en los activos de los que se ocupa la norma.

Por último, el diputado de Amaiur Rafael Larreina ha insistido en la importancia de "avanzar hacia una Europa social", un objetivo que se está dejando de lado frente a otros asuntos, como la unión monetaria y bancaria.