Miles de españoles han colgado en los balcones y ventanas de sus edificios banderas de España. Es un ritual que se ha ido instalando de manera espontánea en las diferentes ciudades españolas, incluso en Cataluña, como respuesta ciudadana al desafío independentista. También se puede ver esta imagen en Valencia, ciudad que la que vive uno de los grandes empresarios del país, Juan Roig, que se ha querido sumar a la moda.
El presidente de Mercadona, Juan Roig, no ha querido ser menos y, como han hecho ya una buena parte de sus compatriotras, en el balcón de su vivienda ha colgado una enseña nacional de grandes dimensiones acompañada de una Gran Señera valenciana.
La bandera española del balcón de Roig destaca por encima de la de sus vecinos. Se trata de un bloque de nueva construcción, con grandes cristaleras y algún balcón donde los habitantes han colocado banderas. Sin embargo, el presidente de Mercadona ha ido más allá y ha rodeado su balconada con esta tela de varios metros de largo.
Los vecinos valencianos de Juan Roig coinciden en señalar que es muy difícil no fijarse en ella, ya que rodea prácticamente toda la balaustrada. De hecho, en todo el edificio, en el que viven varias decenas de familias, no hay una bandera tan grande como la suya.
Juan Roig ha sido uno de los empresarios que ha expresado su inquietud por el desafío independentista de Cataluña. Unas horas después del referéndum del 1 de octubre afirmó sentirse "muy preocupado" y "asustado" por la situación en su comunidad autónoma vecina y pidió a los dirigentes políticos que "solucionen este problema" porque es "su trabajo" a través del "diálogo y el entendimiento". "Como español y como persona estoy muy preocupado y estoy asustado. Esa es la palabra. Hay un gravísimo problema en España y hay que reconocerlo", aseguró el presidente de Mercadona.
Roig es, además, uno de los cinco empresarios del país que ha creado el llamado 'G-5', un grupo que se va a reunir cada tres meses para analizar la situación del país. De él forman parte también el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete; la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, que estuvo este año en el Club Bilderberg; el presidente de la Fundación La Caixa, Isidro Fainé; y el máximo responsable del BBVA, Francisco González. Cuatro hombres y una mujer, o tres representantes de bancos, uno del sector de las telecomunicaciones y un quinto de una cadena de supermercados (la única que no está presente en el Ibex 35), son sus 'fundadores'.
La primera cita reservada de este nuevo G-5 tuvo lugar el pasado 4 de septiembre en la sede de Telefónica en Madrid y en ella, cómo no, hablaron de Cataluña. Según acordaron los presentes, la próxima se celebrará unos días antes de las Navidades. El formato que han escogido es el de un café informal, en la sede de una de sus compañías.
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