La DGT incorpora dos radares fantasma y amenaza con 'hincharse' a poner multas

  • Tráfico ya puede utilizar el sistema Pegasus en sus dos potentes helicópteros EC-135. También puede captar las imágenes de los conductores en HD.
Helicóptero de la DGT.
Helicóptero de la DGT.
Helicóptero de la DGT.
Helicóptero de la DGT.

Atención, conductores. La Dirección General de Tráfico (DGT) cuenta desde hace unos días con dos nuevos 'súper radares' capaces de captar las infracciones que se cometen en las carreteras españolas. Unos días antes de la gran nevada que colapsó la AP-6, Tráfico incorporó a su flota dos nuevos sistemas Pegasus, el dispositivo casi indetectable que es capaz de filmar adelantamientos indebidos, conductores sin el cinturón de seguridad, el uso del teléfono móvil al volante u otras imprudencias. Se trata de un avance significativo del Ministerio del Interior en su lucha contra los automovilistas que cometen temeridades.

Fue a finales del pasado mes de diciembre cuando la compañía Etel 88, que ha desarrollado el sistema Pegasus, entregó a la DGT la ansiada implementación de estos radares prácticamente invisibles para que puedan ser utilizados en los modernos helicópteros bimotor

EC-135 que integran la actual flota de los agentes de Tráfico. Estas dos aeronaves policiales son las más modernas y potentes que tiene la DGT a su servicio ya que pueden alcanzar una velocidad de hasta 135 nudos y hasta ahora no se podían utilizar los Pegasus a bordo de ellas.

De esta forma, la DGT cuenta ya con hasta diez radares Pegasus (ocho que tenían y los dos que acaba de incorporar) capaces de detectar y grabar con un sistema giroestabilizado la velocidad de los vehículos controlados. Este sistema, patentado por la firma canadiense L-3 Wescam, cuenta con la necesaria verificación y homologación por parte de la autoridad certificadora, el Centro Español de Metrología (CEM) que depende del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. 

Captación de imágenes en alta definición

A la incorporación de estos dos nuevos Pegasus a la flota de la DGT hay que sumar una mejora en la captación de imágenes que también acaba de llegar al organismo que ejerce el control las carreteras españolas. Se trata de una evolución en el sistema de grabación que permite la toma de imágenes en movimiento en alta definición, es decir, a 1080 píxeles, como en una televisión plana de cualquier domicilio. Esta implementación permitirá a Tráfico identificar con una mayor facilidad las matrículas de los vehículos de los infractores para proceder a denunciarles.

Ambas mejoras en el sistema de control del Tráfico llegan tras seis años de intenso trabajo entre Tráfico y Etel 88, la empresa que desarrolla el sistema Pegasus, según explica a La Información el presidente de la compañía, José Luis Folch. La DGT adquiere, en definitiva, una potente mejora en sus sistema de captación de infracciones tras unos años en los que los recortes presupuestarios no les han permitido modernizar o ampliar sus dispositivos.

Cuatro años de multas desde el aire

El primer sistema de radar Pegasus fue incorporado por la DGT en marzo de 2013. Desde entonces pueden vigilar que se cumplen las normas de circulación en cientos de kilómetros de carretera en un vuelo de apenas dos horas de duración. Tráfico presume de que se puede controlar un vehículo cada tres minutos de vuelo. El sistema Pegasus consiste en dos cámaras diferentes: una panorámica que facilita el seguimiento de los coches y la captación de la velocidad de estos y una segunda que graba el detalle, permite leer la matrícula de un vehículo y detectar velocidades de hasta 360 km/h. Así, la DGT puede determinar la velocidad a la que viaja un vehículo a más de 300 metros de altura y a una distancia en línea recta de hasta un kilómetro.

Estos 'súper radares' no solo graban los excesos de velocidad sino que también controlan desde el aire otras infracciones como el mantenimiento de la distancia de seguridad, las distracciones, el uso del teléfono móvil, la ausencia del cinturón de seguridad o el casco y la realización de maniobras peligrosas o prohibidas.

La DGT ofreció en 2016 datos sobre cuánto multaban los radares Pegasus: en sus tres primeros años de vida tramitaron 18.274 denuncias, más de 6.000 al año. En vías limitadas a 120 km/h, la velocidad media a la que circulaban los conductores denunciados era de más de 28 km por encima a la estipulada. La velocidad máxima detectada y denunciada en este tipo de vías fue de 242 km/h. En vías limitadas a 100 km/h, por su parte, la velocidad media de los conductores denunciados fue de 130 km/h y la velocidad máxima detectada y denunciada fue de 195 km/h. Asimismo, en las vías limitadas a 90 km/h, la velocidad media a la que circulaban los conductores denunciados era de 122,7 km/h, es decir, 33 km por encima de la velocidad estipulada en la vía. En estas carreteras limitadas a 90 km/h, la velocidad máxima a la que fue interceptado un conductor fue de 199 km/h.

Mostrar comentarios