La ONU condena la oleada de "brutales" atentados en varias ciudades de Irak

Naciones Unidas, 20 mar.- La ONU condenó hoy "en los términos más enérgicos" la cadena de "brutales" atentados terroristas que ha dejado al menos 42 muertos en varias ciudades de Irak, en una ola de violencia que coincide con el noveno aniversario de la invasión de ese país.

"Los atroces crímenes que se cometen contra el pueblo iraquí son totalmente inaceptables", afirmó el enviado especial de la ONU para Irak, Martin Kobler, en un comunicado de prensa sobre los ataques que sacudieron sobre todo a Bagdad y las ciudades de Kirkuk (norte), Kerbala (sur) y Ramadi (oeste).

Kobler condenó "en los términos más enérgicos" unos atentados que calificó de "brutales" y que, según confirmaron a Efe en Irak fuentes policiales, fueron perpetrados mediante coches bomba, varios de ellos conducidos por terroristas suicidas.

El enviado especial de Naciones Unidas pidió "a todos los iraquíes" que permanezcan "firmes" ante unos ataques que quieren "socavar los esfuerzos por lograr un Irak estable y en paz".

Además, exhortó a las autoridades del país a dedicar "todo esfuerzo posible" a identificar a los autores de la violencia y llevarlos ante la Justicia, mientras que transmitió sus "más sentidas condolencias" a las familias de los fallecidos.

Las explosiones se produjeron nueve años después del comienzo de la invasión del territorio iraquí el 20 de marzo de 2003 por una coalición multinacional encabezada por Estados Unidos y que terminó con la caída del régimen del mandatario Sadam Husein.

Además, ocurrieron solo una semana antes de la cumbre que la Liga Árabe tiene previsto celebrar el próximo jueves 29 en Bagdad, ciudad que fue escenario hoy de tres ataques, uno de ellos cerca del Ministerio de Asuntos Exteriores y otro contra una iglesia, que causaron 11 muertos y 37 heridos.

El ataque más sangriento tuvo lugar en la ciudad de Kerbala, 110 kilómetros al sur de Bagdad, cuando dos vehículos hicieron explosión de forma consecutiva, cerca de una comisaría, lo que causó 13 muertos y 38 heridos.

En Kirkuk, situada 200 kilómetros al norte de la capital, murieron 11 personas, entre ellas diez agentes de seguridad, y otras 52 resultaron heridas por el estallido de dos vehículos cargados con explosivos.

Los otros atentados fueron cometidos de manera similar contra diferentes objetivos en las provincias de Babel, Salahedín y Al Anbar y causaron un total de 7 muertos, tres de ellos miembros de la misma familia, y otros 59 heridos.