Las diferencias sobre bildu no impiden un apoyo mayoritario a la ley de víctimas del terrorismo

Las diferencias sobre la irrupción de Bildu en las instituciones no impidieron hoy que la nueva Ley de Víctimas del Terrorismo fuese aprobada por amplia mayoría en el pleno del Congreso, que remitirá ahora el texto al Senado.
El texto legal recibió finalmente el apoyo de 339 diputados, entre los que estaban los representantes de PSOE, PP y la mayoría de los grupos parlamentarios. Sólo votó en contra la líder de UPyD, Rosa Díez, que había planteado que se endureciese el texto legal tras la irrupción de Bildu en las instituciones.
Precisamente este asunto provocó un agrio enfrentamiento entre Díez y el diputado del PNV Emilio Olabarria, quien sostuvo que introducir la cuestión de Bildu en el debate de la Ley de Víctimas era una “verdadera prostitución” del consenso con el que se ha tramitado esta norma.
Por su parte, Rosa Díez votó en contra tras no aceptarse la inclusión de dos enmiendas que aludían a que el Gobierno debía comprometerse a “no mantener ningún proceso de diálogo o negociación que suponga el pago de cualquier precio o contraprestación a los terroristas". La parlamentaria no estimó suficiente que PSOE y PP hubiesen pactado mencionar en el texto aprobado que debía buscarse “la derrota definitiva, incondicional y sin contrapartidas del terrorismo”.
“FUNDAMENTO ÉTICO”
Por su parte, los representantes del PSOE, Antonio Hernando, y del PP, Alfonso Alonso, no quisieron incidir en la polémica sobre Bildu y destacaron la importancia de que esta nueva Ley de Víctimas vaya a ser tramitada con una amplio apoyo de los grupos parlamentarios.
En este sentido, Alonso, aunque lamentó la irrupción de Bildu en las instituciones, destacó el “esfuerzo de consenso y de unidad” realizado para aprobar este texto legal. Añadió que las víctimas del terrorismo son el “fundamento ético” de la democracia.
Por su parte, Hernando señaló que la aprobación de la Ley de Víctimas y lo que éstas constituyen representa un “fracaso ideológico y político” de los terroristas, cuyos objetivos quedan absolutamente deslegitimados. El representante socialista también destacó la importancia de que esta ley se hubiera aprobado por amplia mayoría.