Los socialistas españoles cierran filas con su candidato y piden movilización

María Luisa González

Madrid, 30 sep.- El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) inauguró hoy su conferencia política para fijar las bases del programa electoral para los comicios generales del 20 de noviembre con el objetivo de revertir las encuestas, que dan como favorito al opositor Partido Popular (PP, centroderecha).

El encuentro, que reúne en Madrid a unos 2.500 participantes, entre militantes e invitados, deparó una sorpresa en su comienzo con la inesperada intervención del exdirigente Felipe González, que fue presidente del Gobierno en España entre 1982 y 1996 en tres mandatos consecutivos.

Enfundado en una cazadora negra, González, que no intervenía desde hace años en una conferencia del partido, llamó a los socialistas a movilizarse en los dos meses que quedan para la cita electoral y desmentir las encuestas.

"Necesitamos una movilización inmediata a la ofensiva, no a la defensiva", dijo González, que pidió huir del sentimiento de derrota, porque los socialistas -dijo- "tienen la respuesta a la crisis que no tiene la derecha".

El exdirigente se puso a disposición del candidato Alfredo Pérez Rubalcaba, elegido como cabeza de lista después de que el actual jefe del Ejecutivo y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, renunciara a concurrir a un tercer mandato.

También Zapatero, que inauguró con su discurso la conferencia, expresó su apoyo total a Rubalcaba, que fue su "número dos" como vicepresidente primero del Gobierno.

"Siempre da la cara, nunca se pone de perfil", está siempre disponible y piensa "en el interés general", afirmó Zapatero, que alabó su labor en la lucha contra la organización terrorista ETA, en alusión a su etapa como ministro del Interior, que dijo llevó a que "esté agónica" la banda armada.

El jefe del Ejecutivo dedicó gran parte de su intervención a justificar las duras medidas que tuvo que adoptar para atajar la crisis y se mostró confiado en que el futuro reconocerá que con ellas "evitamos una situación muy grave para España".

"No tengáis ninguna duda que España superará la dura crisis y seremos capaces de mantener la cohesión social y renovar la economía", agregó.

Al igual que Felipe González, Zapatero también llamó al PSOE a recuperar el optimismo y luchar por la victoria el 20-N, porque dijo "somos el partido que más elecciones hemos ganado y el que más ha contribuido a estos 30 años de modernidad" en España y en la construcción europea.

Bajo el lema "Ideas de verdad", los socialistas trazarán desde hoy y hasta el domingo las bases de su propuesta a los españoles para las elecciones del 20 de noviembre a partir de un documento base redactado por la ex ministra Cristina Narbona, con el hilo conductor de reactivar la economía y la creación de empleo preservando los pilares del estado de bienestar.

Las conclusiones de la conferencia serán presentadas el domingo, antes de que Rubalcaba pronuncie el discurso de clausura en el que trazará las grandes líneas de su propuesta para el 20-N.

Las encuestas prevén un fuerte castigo del electorado al Partido Socialista por los recortes sociales que acometió para atajar la crisis, que en España se traduce en casi cinco millones de desempleados (el 21 por ciento de la población activa), un alto déficit público y el estancamiento de la economía.

Según los últimos sondeos, el PP obtendrá una holgada victoria, que puede superar los 176 escaños de la mayoría absoluta.

En los comicios adelantados por la crisis al 20 de noviembre -estaban previstos para marzo de 2012-, 35,7 millones de españoles con derecho a voto elegirán los 350 miembros que forman el Congreso de los Diputados (cámara baja) y los 208 senadores de la cámara alta.

El Partido Popular celebrará la próxima semana una convención en Málaga (Andalucía, sur de España), para diseñar también su programa para las elecciones, a las que concurre con Mariano Rajoy como cabeza de cartel.

Será la tercera ocasión en la que el líder 'popular' opta a la presidencia del Gobierno español aunque en esta ocasión su rival será Rubalcaba y no José Luis Rodríguez Zapatero, quien le derrotó en las dos anteriores, en 2004 y en 2008.