La presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, fue la encargada de inaugurar el acto oficial de la conmemoración del cuadragésimo aniversario de la Constitución en el hemiciclo del Congreso de los Diputados, al que también acudieron los cuatro expresidentes del Gobierno que permanecen vivos: Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, parlamentarios de cuatro generaciones y once presidentes autonómicos.
Pastor hizo un alegato en su discurso al consenso y el entendimiento que propició sacar adelante la Carta Magna, que sigue viva 40 años después. También alabó el papel del Rey emérito, al ex presidente Adolfo Suárez y a los padres de la Constitución, recordando sus discursos y su generosidad.
"Después de años de disputas fuimos capaces de encontrarnos en un proyecto común" dijo Pastor respecto a 1978, que aseguró que también toca "felicitarnos por su vigencia, porque ha traído estabilidad democrática, que ha permitido los mejores cuarenta años de nuestra historia en torno a unos principios y valores compartidos".
La presidenta del Congreso aseguró que la Carta Magna fue el mejor instrumento de la transición y una obra forjada entre todos para servir a todos gracias al consenso.
Además señaló que "cada Gobierno -que la Constitución ha permitido alternar entre los partidos- ha contribuido a la historia de España" y citó a Jordi Solé Tura, "que fue muy claro al decir que no pretendieron en ningún momento hacer una Constitución de corte ideologista".
"España es hoy más grande y abierta y más prospera, porque nada ha sido fruto del azar y sí del esfuerzo", aseguró, pero advirtió en que de debemos atentos para dar soluciones a las demandas de los españoles.
La presidenta del Congreso de los Diputados reivindicó el papel fundamental de los ciudadanos y destacó que no es casualidad que seamos el país con mayor esperanza de vida y con récord de trasplantes gracias al tesón y esfuerzo, ilusión y sentido de responsabilidad de la ciudadanía. "Somos una nación que derrotó al terrorismo y tiene que estar orgullosa de lo conseguido y atentos para poner soluciones a los problemas y demandas de la ciudadanía", entre los que destacó el desafío de "la lacra inaceptable de la violencia contra las mujeres".
Por último, recordó que la Constitución de 1978 "nunca ha sido un candado" y reconoció que, 40 años después, es "perfectible", al tiempo que admitió la posibilidad de reformas. Pese a todo subrayo que cualquier decisión que se adopte al respeto necesitará aquel "espíritu de acuerdo, concordia, diálogo y colaboración" de la Transición.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios