Guatemala, 2 oct.- El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, dijo hoy que las estrategias que emprenda la región contra las drogas deben ser fruto del consenso y no de la imposición, al referirse a la propuesta presentada en la ONU junto con México y Colombia para que se revise la vigencia de las políticas actuales.
"No estamos imponiendo nada a ningún país. Creemos que las decisiones tienen que salir después del análisis, las pruebas, los documentos respaldados", dijo Pérez Molina a los periodistas tras concluir una actividad en la población de Concepción Tutuapa, a 252 kilómetros al noroeste de la capital de Guatemala.
Colombia, Guatemala y México pidieron hoy al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que llame a los Estados miembros a revisar la vigencia de las políticas contra las drogas y que convoque una conferencia internacional para dar más eficiencia a las estrategias actuales.
"Resulta inaplazable revisar el enfoque mantenido hasta ahora por la comunidad internacional en materia de drogas, con el fin de detener los flujos de dinero proveniente del mercado ilícito de drogas", dicen los tres Gobiernos en una carta remitida hoy formalmente a Ban por sus respectivos embajadores.
En ese sentido, el mandatario guatemalteco, que ha propuesto que se despenalice el tráfico, comercio y consumo de drogas, señaló que las decisiones sobre nuevos paradigmas y alternativas para hacer frente al narcotráfico tienen que ser asumidas "en conjunto" por la comunidad internacional para que sean efectivas.
"No nos sirven decisiones unilaterales de dos o tres países. Nos sirven decisiones a nivel por lo menos regional, y ojalá a nivel mundial", precisó Pérez Molina.
En la carta remitida hoy formalmente a Ban, en Nueva York, los Gobiernos de Guatemala, México y Colombia destacaron la necesidad de que los resultados de esa revisión culminen "en una conferencia internacional que permita tomar las decisiones necesarias a fin de dar mayor eficacia a las estrategias y los instrumentos con los que la comunidad global hace frente al reto de las drogas y sus consecuencias".
"Naciones Unidas debe ejercer el liderazgo que le corresponde en este esfuerzo y conducir una profunda reflexión que analice todas las opciones disponibles, incluyendo medidas reguladoras o de mercado, a fin de establecer un nuevo paradigma que impida el flujo de recursos hacia las organizaciones del crimen organizado", dijeron en esta ocasión en la declaración conjunta.
Guatemala, Colombia y México, añadió Pérez Molina, "unificamos esfuerzos para hacer este llamado a nivel mundial" porque son tres de los países de la región que más "han sido afectados por el narcotráfico, la violencia e inseguridad".
La iniciativa de comenzar una discusión internacional sobre nuevas estrategias y combate al narcotráfico, entre ellas la despenalización de las drogas, la lanzó Pérez Molina en marzo pasado y desde entonces ha logrado los apoyos de México, Colombia y Costa Rica.
Pero también ha encontrado la férrea oposición de Estados Unidos, y el resto de países centroamericanos.
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