Carles Puigdemont almuerza hoy en un restaurante de Girona situado en la céntrica Plaça del Vi, donde se ubica el ayuntamiento, después de haber efectuado a través de TV3, que le sigue llamando president ante la indignación del Gobierno, una "declaración institucional" desde esta ciudad para pedir "paciencia, perseverancia y perspectiva" a los catalanes.
Puigdemont se ha fotografiado en la calle con diversos ciudadanos antes de grabar esa comparecencia en la delegación de la Generalitat en la capital gerundense, muy próxima a la sede consistorial.
Varias personas han publicado en las redes sociales esas instantáneas con Puigdemont, quien se ha dirigido más tarde al céntrico restaurante en una aparente imagen de normalidad después de su cese como president ordenado ayer por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Su presencia en Girona, capital de la que fue alcalde, coincide con las fiestas patronales de la ciudad, Sant Narcís, que se celebran durante estos días. Tras el almuerzo, se ha paseado por el centro de la ciudad acompañado de su mujer, Marcela Topor, entre muestras de apoyo de muchos vecinos. Ha caminado desde el restaurante hasta la plaza Independència (nunca mejor dicho), donde se ha tomado un café y ha saludado a quienes se le han acercado.
Según fuentes próximas al cesado president, su objetivo es mostrar una imagen de "normalidad", por lo que pasará el día "en familia" con motivo de la celebración de las mencionadas fiestas patronales de Sant Narcís.
MINUTO A MINUTO | Puigdemont, acompañado por su esposa, en una cafetería de Girona, un día después de ser cesado https://t.co/IbGQ2T9d8W pic.twitter.com/YmJz13x5gi
— laSexta Noticias (@sextaNoticias) 28 de octubre de 2017
Puigdemont pasea como un héroe por las calles de Girona https://t.co/HqJLx6UAdH pic.twitter.com/vykt3YF1Q2
— informativost5 (@informativost5) 28 de octubre de 2017
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