PSC restituye la capacidad de iniciativa parlamentaria de los tres díscolos

  • La dirección del grupo parlamentario del PSC ha decidido hoy restituir la capacidad de iniciativa parlamentaria de los tres diputados díscolos en las comisiones en la Cámara catalana de las que forman parte, dada la dilación en el dictamen de la Comisión de Garantías del partido.

Barcelona, 10 jun.- La dirección del grupo parlamentario del PSC ha decidido hoy restituir la capacidad de iniciativa parlamentaria de los tres diputados díscolos en las comisiones en la Cámara catalana de las que forman parte, dada la dilación en el dictamen de la Comisión de Garantías del partido.

Después de romper la disciplina de grupo en enero pasado en una votación sobre la consulta soberanista, Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura fueron apartados de todos los cargos de representación que ostentaban, se les obligó a cambiar de escaño en el hemiciclo y desde entonces no podían presentar iniciativas parlamentarias si no eran avaladas por el grupo.

Según han explicado a Efe fuentes del partido, la dirección del grupo socialista ha decidido hoy que, a los derechos inherentes de la función de diputados de los tres disidentes, se añada de nuevo la capacidad de iniciativa parlamentaria que tenían en nombre del grupo en las comisiones de las que eran miembros, una decisión de la que han sido informados ya los tres diputados críticos.

Elena forma parte de la comisión de Cultura, mientras que Ventura lo es de la de Infancia y Geli de la de Salud y la de Universidades e Investigación.

Una restitución "parcial" ante la dilación del dictamen que debe emitir la Comisión de Garantías del PSC -que les suspendió cautelarmente en sus cargos orgánicos en el partido hace casi medio año-, y que se produce antes del Consell Nacional extraordinario que podría celebrarse en los próximos días, a falta de cerrar una fecha.

Precisamente, en la reunión que los tres críticos mantuvieron hace dos semanas con el primer secretario socialista, Pere Navarro, reclamaron que se resolviera su situación en el grupo parlamentario de forma inmediata, como primer paso para pacificar las grietas internas del partido.

Los tres diputados habían tratado de solucionar su situación reclamando un informe jurídico al Parlament que les detallara las opciones legales que les amparaban para corregir su situación, pero la Mesa del Parlament les respondió en abril en dicho informe que no podía "interferir" en el funcionamiento interno de los grupos parlamentarios, así como que tampoco existe el derecho a que fueran portavoces en una comisión o un debate determinado.

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